Efectivos de la Prefectura Naval Argentina incautaron más de 50 litros de cocaína líquida, durante un procedimiento realizado en la ribera del río Paraná, de la ciudad misionera de Puerto Rico, informaron fuentes oficiales a Data Clave.

Aunque no se trata de algo habitual, no es la primera vez que los narcotraficantes usan este sistema para esconder la droga. Ya en la Argentina se denunciaron los primeros casos de este tipo en 2014.

El operativo mencionado tuvo lugar cuando el personal de la Fuerza, que se encontraba realizando un patrullaje por la zona fronteriza para prevenir el delito, observó a dos personas que caminaban por un angosto camino entre la maleza, con varios bultos a cuestas.

Al aproximarse al lugar donde transitaban los hombres (kilómetro 1754 del Puerto Luján), la Prefectura llevó a cabo un rastrillaje y halló abandonados cinco bidones, de diez litros cada uno, que en su interior contenían cocaína en estado líquido.

Tras el hallazgo se dio intervención en el hecho a la Fiscalía Federal de Primera Instancia de Oberá (Misiones), a cargo de la Dra. Viviana Vallejos.

La droga secuestrada, que supera los 68.000.000 pesos, fue dejada en depósito judicial a disposición del magistrado interviniente.

Según los expertos, transformar la cocaína en polvo a líquida es un método sencillo, porque la droga es una sustancia altamente soluble y puede mezclarse fácilmente con otros compuestos. En forma líquida es posible ocultarla en varios productos, por ejemplo, botellas de licores o vino.

Según Infosurhoy.com, el sitio de noticias del Comando Sur de Estados Unidos (USSOUTHCOM), medio kilogramo de cocaína en polvo puede disolverse completamente en un litro de agua y pasar desapercibida a simple vista.

Y cuando la droga líquida llega a su destino final, el compuesto puede regresar a su estado original filtrándolo y decantándolo para recuperar cerca de 90% del producto.