Fernández contó cómo fue el acuerdo con la familia de Diego y responsabilizó a la Ciudad y a barras por los incidentes
Dijo que “debimos haber previsto” la presencia de hinchas violentos y se desligó del operativo de la policía Metropolitana, al que calificó de “desmedido”.
Alberto Fernández volvió a hablar luego de la despedida de Diego Armando Maradona, que terminó con incidentes en la Av. 9 de julio y en Casa Rosada. Al respecto, planteó que en el operativo de seguridad en la principal arteria de la Ciudad el problema “fue un hecho desmedido de la policía” y sostuvo que en Balcarce 50 los desmanes los provocaron un grupo de violentos: “Seguramente debimos haber previsto la presencia de barras bravas”, manifestó.
La 12, la barra de Gimnasia y otros referentes de las tribunas del fútbol argentino formaron parte de la despedida. Fernández diferenció a los hinchas y a las familias: “Confiamos mucho en la conciencia social y la inmensa mayoría no participaron de esos disturbios”, planteó. Y dijo que el Gobierno resolvió el problema, aunque “si nos encontramos con un grupo de violentos es muy difícil”. También señaló que “lo que pasó hubiera pasado en cualquier lado”.
El Presidente dijo que quienes entraron al Patio de las Palmeras lo hicieron “con una violencia singular” y que las imágenes que se viralizaron desde adentro de la Rosada, a metros de las oficinas del gabinete, solo fueron situaciones de “unos cinco o diez minutos” según el mandatario.
En relación con el dispositivo en las calles, siguió la línea del ministro del Interior, Wado de Pedro, quien dijo que el gobierno porteño envió a las fuerzas a reprimir: “No mandamos cortar nada, solo anunciamos que a las 4 de la tarde terminaba el velatorio”, dijo Fernández. Y agregó que la decisión de cortar el paso a un radio de 20 cuadras cuando seguía llegando gente fue de la Ciudad.
En relación con el diálogo y la negociación con la familia de Maradona cuando empezó a acumularse gente en los alrededores de la Rosada y cuando quedaban pocas horas para la finalización del funeral, contó que “hablamos con Cristina cuando vimos la gente que había y propusimos extenderlo hasta las 19”. Aclaró que no culpó a la familia por los hechos y que respetó lo que exigieron Claudia Villafañe y las hijas: terminar a las 16 para tener un último rato de soledad junto a los restos de Diego. Sobre la decisión de sus seres queridos, Fernández concluyó: “Diego Maradona fue un ser humano y tiene familia y quienes dicen cómo realizar la ceremonia es la familia. Yo les habría ofrecido hacerlo en un lugar abierto”.