Un relevamiento elaborado por Contextual, una iniciativa del Instituto de Desarrollo Digital de América Latina y el Caribe (IDDLAC), apuntó contra el candidato libertario Javier Milei por su accionar en las redes sociales en la última corrida del dólar.

La cotización paralela superó barrera de los 1.000 pesos, pero hoy mostró un desplome tras el anuncio vinculado al swap con China. Según el informe, Milei y su equipo de influencers libertarios, como El Trumpista, Termo, y Agarra La Pala, entre otros, “alentaron y fogonearon” en las redes sociales el aumento de la divisa extranjera.

El documento también apuntó contra los youtubers, tiktokers e influencers ligados al espacio político, como también los comentarios públicos del candidato a jefe de Gobierno Ramiro Marra, que realizó un posteo en esa línea en la red social X (exTwitter) y cosechó casi 8 millones de vistas.

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X de Ramiro Marra

Todo comenzó cuando Milei habló sobre el ahorro en pesos: “Jamás en pesos, jamás. El peso es la moneda que emite el político argentino, por ende no puede valer ni excremento, porque esas basuras no sirven ni para abono”. Horas más tarde y con el dólar en alza, el economista publicó un tweet -que consiguió 1.000.000 de visualizaciones y 33.800 interacciones- atacando al “modelo económico que empobrece a los argentinos y solo beneficia a los políticos”.

El dólar siguió subiendo y otras cuentas ligadas al candidato, según el estudio, comenzaron a criticar a la “casta” por la suba del dólar, defender los dichos de Milei y redoblaron su mensaje #chauplazofijo y dolarización. En un lapso de poco más de una hora, los tuits de influencers relacionados con Milei habían logrado cosechar 7,7 millones de visualizaciones y 29.329 interacciones.

La semana pasada, el fiscal federal Franco Picardi decidió impulsar una investigación a partir de la denuncia del presidente Alberto Fernández luego de que el libertario recomendara sacar la plata de los bancos y comprar divisas en el mercado paralelo, lo que algunos interpretaron como un intento de iniciar una corrida bancaria.

Sin embargo, el economista negó las acusaciones y pidió su sobreseimiento “por inexistencia de delito”. “Nuestro asistido profirió sus afirmaciones en ejercicio de la más básica libertad de expresión, y sin ninguna intencionalidad ni política ni electoral, pues, en esencia, es lo que viene afirmando desde sus primeras apariciones públicas, aun de haberlo hecho con alguna intencionalidad, el sentido común indica que la única posible es la de favorecer su caudal de votos, y tal intencionalidad impide tener por configurados los delitos denunciados, por lo cual la falta de acción aparece procedente”, señalaron los abogados del candidato presidencial.