No hubo acuerdo y los transportistas autoconvocados retomarán este miércoles las protestas en todo el país. La medida impacta en la exportación de granos y hay preocupación en el sector. Reclaman por los aumentos en los costos en la actividad y por las tarifas que implican el traslado de granos y de hacienda. 

“Empezamos un año con costos acumulados de más del 130% y entendemos que esos costos son intransferibles a la tarifa porque sino después se desprende el valor sobre el consumidor final”. explicó Santiago Carlucci, presidente de Transportistas Unidos de Argentina, en diálogo con Radio 2. Advirtió a su vez que “de manera paulatina y progresiva, sin dar mucho aviso, vamos a ir acercándonos nuevamente a las rutas a llevar a cabo lo que nosotros consideramos que es un reclamo legítimo por la situación de emergencia económica que atraviesa el sector”.

La protesta, que incluye el bloqueo de terminales portuarias, comenzó hace 15 días en Quequén y Bahía Blanca. También se registraron medidas similares en Santa Fe, que fueron despejadas por la Policía local. Los manifestantes planean volver a cada uno de estos puntos, y no descartan movilizarse en la puerto de Buenos Aires. En el inicio de este conflicto, Transportistas Unidos se reunieron con el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, al que le plantearon una norma que “asegure la obligatoriedad del pago de las tarifas referenciales de fletes por parte de todos los dadores de cargas de granos del país”. Los transportistas calificaron de muy positiva la reunión, pero a una semana de aquel diálogo, y ante la falta de respuestas, resolvieron volver a las rutas. 

El anuncio generó rechazos en el agro. Desde la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA) señalaron que la medida “comprometerá las exportaciones de trigo y cebada, en el marco de un nuevo llamado a detener el flujo general de mercancías”. A su vez, señalaron que “el sector agro exportador, aunque es ajeno a ese conflicto, lamenta el impacto en las demoras de entregas de granos, problemas de cumplimiento de programas de exportación y la baja de categorización entre los puertos del mundo, así como el abastecimiento en el mercado interno”.

CIARA on Twitter

“Los mercados internacionales son temerosos de los incumplimientos. La Argentina pagará, en un momento difícil para su economía, con divisas no ingresadas, multas, trabajo no realizado y con la pérdida de participación en el mercado internacional”, concluyeron desde el Ciara.