De acuerdo a un informe difundido hoy por la Cámara de Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC), entre soja y maíz hay 41,994 millones de toneladas sin vender, sumado a lo que ya está vendido sin fijar precio. De ese total, el 67% corresponde a la soja con 28,2 millones de toneladas y el 33% a maíz con unas 13,7 millones.

Para el informe de CIARA-CEC, este cuadro “refleja claramente que el productor decidió tener liquidez, o hacer caja, vendiendo el maíz, mientras que decidió no vender la soja disponible o vender lo mínimo, y entregar la mayor cantidad de soja Precio A Fijar (PAF), a la espera de una mejora futura en los precios".

Quedan casi 42 millones de toneladas de granos sin vender ni fijar precio

En el caso de la soja, luego de tocar un mínimo de US$ 340 la tonelada en el mercado de Chicago en agosto, tuvo una fuerte recuperación que la ubicó en los US$ 370, pero aún lejos de los US$ 420 del año pasado.

El analista Julián Cuenca explicó a Data Clave que en el caso de la soja “los productores pueden retener con mayor facilidad los granos, porque la industria aceitera tiene una demanda constante, pero en el caso del maíz, se trata de vender apenas se levanta la cosecha”.

En ese sentido, casi la mitad de los dólares exportados provienen de seis productos del campo. En el primer semestre del año se exportaron bienes por US$ 38.176 millones, con un aumento del 14% interanual. Pero uno de cada cuatro de esos dólares se originaron solamente en el complejo sojero.

El informe de Ciara-CEC destacó que durante agosto el ingreso de divisas fue de US$ 2.452 millones, 40% más en relación al mismo mes de 2023, un año signado por la sequía, pero con una baja del 6% en relación a julio .

Este ingreso de divisas de agosto estuvo lejos de los niveles alcanzados para ese mismo mes en 2021, US$ 3.050 millones, y del 2022, con US$ 3.387 millones, años en que se combinaron elevados precios junto con grandes cosechas.

Ahora, en una comparación a mas largo plazo, en los primeros ocho meses del año totalizó la liquidación de divisas ascendió a US$ 16.092 millones, cifra levemente superior al verificado para el mismo período en 2017 y 2018, pero muy por debajo de lo registrado en 2021 y 2022.