El ministro de Economía, Sergio Massa, les advirtió este jueves a los principales dirigentes de la Unión Industrial Argentina (UIA) la decisión del Gobierno nacional de salvaguardar los dólares que le quedan al Banco Central, y volvió a cargar contra lo que él llamó alguna vez “un festivas de importaciones”.

"Hasta fin de año nos aparecían pendientes pedidos por US$ 39.000 millones en importaciones" y "todos saben que ese número no es el que necesita la producción para trabajar. Tenía que ver con pedidos acumulados, medidas cautelares", dijo Massa ante un auditorio colmado por los principales dirigente industriales del país reunidos en Parque Norte.

Más allá de esta crítica, Massa destacó que la cartera económica "no es un enemigo sino un aliado de ustedes (los empresarios) para tratar de lograr mayor productividad, mejor competitividad y mayor volumen de exportaciones y de generación de trabajo genuino para Argentina".

Massa reiteró que los dólares que tiene el Banco Central “están en las reservas se usen para la producción y el trabajo, no para la especulación e importación de bienes terminados".

Al realizar un balance de sus primeros 100 días al frente del Palacio de Hacienda, aseguró que "el desafío más grande era estabilizar y volver a intentar poner en funcionamiento las variables económicas".

"Pudimos ordenar la relación con el FMI y el Club de París, reconstruimos la relación con el BID y el Banco Mundial, uno de los pilares para reconstituir reservas", resaltó en diálogo con el secretario de la UIA, Miguel Ángel Rodríguez.

En ese sentido, explicó que tanto la acumulación de reservas como el orden fiscal deberían ser los "principios que tienen que regir en la Argentina, gobierne quien gobierne".

En ese marco, Massa destacó el rol que tuvo la oposición en la Cámara de Diputados al afirmar: "Valoro totalmente la actitud del radicalismo en apoyar el Presupuesto".