Las consultoras estiman un amplio rango para la inflación de febrero de entre el 13 y 19%
Este miércoles el Indec dará a conocer la suba de precios minoristas, calculada en 21,9% por los analistas privados, lo que dejaría un alto “efecto arrastre” para el mes en curso, con fuerte caída el consumo.
Con casi la mitad de febrero recorrido y los datos de una fuerte caída de las ventas en todos los sectores, las consultoras privadas ya han comenzado a hacer sus estimaciones de cuánto será la inflación para el segundo mes del año.
El vicepresidente de IERAL, Marcelo Capello, explicó que “se especula con que la inflación de enero se ubicó entre el 20 y 22 %, lo que dejará un arrastre para febrero, por lo que (la suba de precios) difícilmente sea menor al 15%” a final del mes en curso.
Capello, en declaraciones a CNN-Radio, apuntó a que “el menor consumo hizo morigerar los aumentos, pero a su vez las subas fuertes del dólar fueron repercutiendo en los precios y dejando ese arrastre estadístico”.
“Para marzo apuntaremos a una inflación más cercana al 10%, pero habrá paritarias, nuevos salarios y el ministerio de Economía seguramente deje de aumentar un 2% por mes el dólar”. En este sentido, el economista consideró que “con una suba mayor del tipo de cambio puede que sea difícil que la inflación baje más rápido en el primer semestre de este año”.
En tanto, las consultoras que participaron del Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM) que realiza el Banco Central de la República Argentina (BCRA) estimaron una inflación del 21,9% para enero, 3,1 puntos porcentuales (p.p.) del informe que se realizó a finales de diciembre y para febrero calcularon una suba de precios del 18%.
Un visión más optimista brindó la consultora Econométrica que apuntó a que “la contracción monetaria y el ancla cambiaria aplicada luego de la fuerte devaluación de diciembre posibilitaron una marcada desaceleración de la inflación, que del 25,5% del último mes de 2023 podría pasar a un 19% en enero y un 13% en febrero”.
Durante la primera semana de febrero “registramos una inflación del 2,8%" y en el acumulado de las últimas cuatro se registró un 9,6% de incremento, de acuerdo con lo señalado en el informe de la entidad dirigida por Ramiro Castiñeira.
Además, según el promedio móvil de las últimas cuatro semanas, la inflación en alimentos y bebidas corre a un ritmo de 10,5% mensual.
La consultora precisó que “la inflación acumulada en los meses de diciembre/enero/febrero reflejaría un incremento del 68,7%”, más de 30 puntos porcentuales por debajo de la proyección del 100% que se estimaba para el mismo período a fines del año pasado.
Por su parte la economista Marina Dal Poggeto advirtió que ”si generás caídas en el consumo como las que estas generando, bajas los precios”, sin embargo “habrá que ver cómo reacciona la calle si el ajuste se hace algo permanente”.
En ese sentido, y de acuerdo a un estudio difundido por el Instituto para el Desarrollo Social Argentino (IDESA), el superávit financiero alcanzado en enero, que en el devengado fue equivalente al 0,2% del PBI, se logró más que nada por la licuación de los gastos vía inflación antes que por un ordenamiento virtuoso de las cuentas públicas, al punto que las jubilaciones continuaron con su deterioro y en febrero caerán al nivel real más bajo en lo que va del siglo XXI.
“La estrategia de equilibrar las cuentas públicas en base a la licuación de jubilaciones es muy endeble”, sostuvo la entidad dirigida por Jorge Colina.
“Por un lado, porque tiene un impacto muy regresivo y genera tensiones políticas. Por otro, porque aumenta las demandas judiciales contra la ANSES debido a que la justicia previsional no tolera la licuación de jubilaciones. No es la primera vez que el ajuste fiscal se sostiene” de esta manera, “pero nunca con este nivel de intensidad. La principal conclusión es que el superávit de enero es positivo, pero muy precario", manifestó.