La Unión Industrial Argentina (UIA) sumó en las últimas horas un nuevo reclamo al Gobierno, esta vez, fue que la suba del 50% de las tarifas eléctricas a las grandes empresas por la quita de subsidios, la cual pidió que se haga de manera escalonada, y que también se extienda a otros sectores de la sociedad.

El pedido forma parte de una serie de críticas y reclamos que hizo la central fabril luego de la reunión que mantuviera ayer la Junta Directiva de la organización, que reúne a representantes de todas las provincias.

Más allá de las voces de apoyo surgidas el lunes, cuando Alberto Fernández anunció un plan de aliento para el sector automotriz, la UIA emitió un comunicado en el que manifestaron su “preocupación por la suba en las tarifas a industrias de alto consumo energético -que es el segmento que compra directamente a las distribuidoras-“. 

El Gobierno dispuso a fines de febrero quitar el subsidio a las tarifas de electricidad que favorecía a las grandes empresas, como automotrices y petroleras, lo que se traduciría en aumentos de hasta el 50% en las boletas de estas compañías que compran directamente en el Mercado Eléctrico mayorista.

Desde la UIA pidieron que esos virtuales aumentos “deben darse en un marco de previsibilidad y con escalonamientos. También se destacó que el aumento de tarifas -y la reducción gradual de los subsidios- no puede recaer exclusivamente sobre el sector productivo, que en el actual contexto debe sostener el mercado interno y ser competitivo en lo que refiere a exportaciones”.

El comercio exterior también es un tema de quejas por el problema que enfrentan los empresarios por las demoras en los permisos que genera el Sistema Integral de Monitoreo de Importaciones (SIMI) .

“El actual esquema no permite que se garantice la producción de bienes en un contexto de recuperación de la actividad”, advirtió la UIA.

Además, los representantes de Junta Directiva manifestaron su preocupación “por los bloqueos que están sufriendo establecimientos industriales en todo el país” los cuales “provocan perjuicios a las empresas y a toda la población en el marco de una crisis sanitaria”

La UIA también reiteró sus críticas a medidas como la prohibición de despidos y suspensiones o el régimen de doble indemnización, las cuales “no apuntan” en la normalización del mercado laboral, e incluso terminan “impactando de manera negativa sobre la formalización y la necesaria ampliación de las dotaciones de trabajadores con miras a impulsar el crecimiento económico”.