No llueve, o por lo menos, no llueve todo lo necesario para revertir la peor sequía de los últimos 100 años. La Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) volvió a recortar su estimación de cosecha de soja, ahora espera 21,5 millones de toneladas, una cifra 56% menor a la calculada en el inicio de la campaña.

Eso, junto a la sequía que afecto la campaña de trigo 2022/23 y la cosecha de maíz, hace perder al país unos US$ 18.000 millones en exportaciones, y hasta tres puntos del PBI, según estimaciones privadas.

Pero, además, la falta de lluvia también afectará al gobierno que asuma el 10 de diciembre. Para ese momento tendría que comenzar a recolectarse lo sembrado a partir de septiembre de trigo, y hasta ahora, las perspectivas no son nada halagüeñas.

Durante el año pasado “el foco de la sequía estaba en el oeste y desde las provincias de Córdoba y San Luis fue expandiéndose hacia el este; pero las condiciones en la provincia de Buenos Aires eran buenas”.

Sin embargo, ahora “la provincia triguera por excelencia, Buenos Aires, arranca mayo con la mitad del territorio en la categoría muy seco”, advirtió la BCR.

Los perfiles de los suelos, teniendo en cuenta el primer metro y la ocupación de una pradera permanente, “están en las condiciones más secas de los últimos 30 años”, agregó el informe.

Este presente hace que “los ajustes negativos sigan efectuándose a medida que avanzan las cosechadoras” en el área sembrada con soja, que, junto al maíz, son los principales productos agrícolas de exportación.

Los mayores recortes de rindes- se lleva recolectado poco más del 50% sembrado - corresponden a la provincia de La Pampa, donde “las inéditas heladas de febrero, la falta de agua y el calor liquidaron a buena parte de los cultivos”. Buenos Aires y Córdoba siguen en esa lista.

En lo que respecta al maíz 2022/23, con un 32% de avance en la cosecha a nivel nacional, lo que suceda con la trilla del maíz tardío “es la incógnita que falta despejar para saber el volumen final de la cosecha” que se mantiene “de manera tentativa” en 32 millones de toneladas.

El ministro de Economía, Sergio Massa, anunció el jueves que se avanzará en una reforma de la Comunicación 7720 del Banco Central, con el fin de aumentar el acceso al crédito para los productores, y se trabajará en un programa de canje, para que los granos puedan ser utilizadas como instrumento de pago en la adquisición de fertilizantes, agroquímica y otros insumos."Estamos frente a la peor sequía de los últimos 100 años de Argentina. Para que se tome dimensión del daño que le produce a la economía, le arrancó de un mes para otro el 20% de la facturación, de la producción, exportaciones e ingresos que nuestra Nación tenía previsto", enfatizó el ministro.