La calificadora Moody’s se suma a las criticas por la recompra de bonos
En un informe, señala que los títulos que van a ser comprados representan "un pequeño ahorro en el mediano plazo respecto de lo principal que empieza a amortizar en 2024".
La recompra de bonos 2029 y 2030 por US$ 1.000 millones lanzada la semana pasada por el Gobierno aporta “poco para respaldar la capacidad de pago del soberano”, advirtió hoy la agencia calificadora Moody’s, a través de un documento. Es más, la operación supone “un intercambio en dificultades y, por lo tanto, un incumplimiento”, según los preceptos que manejan en la firma para evaluar el perfil de riesgo soberano.
“Los bonos se están recomprando a niveles de dificultad y darán como resultado una pequeña inversión a mediano plazo. Sin embargo, la operación viene a costa de la escasez de divisas que presiona las finanzas externas del país haciendo poco para respaldar la capacidad de pago del soberano en 2024 y más allá”, sostiene Moody’s. De esta manera la agencia calificadora se sumó a las criticas que realizaron otras calificadoras de riesgo internacionales y consultoras locales a la operación anunciada hace una semana por el ministro de Economía, Sergio Massa.
En el plano local, la consultora Equilibra apuntó a que "La contracara de esta operación es el uso de dólares escasos, mientras que se ahorran US$ 3.000 millones del pago de deuda en los próximos 8 años, hoy se pierden US$ 1.000 millones en un contexto de fuerte sequía y una meta estructural de acumulación de reservas internacionales", acordada con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
La consultora que dirige Martín Rapetti señaló que la operación tiene dos objetivos inmediatos: profundizar la baja del riesgo país y moderar la brecha cambiaria financiera. "Para que los tipos de cambio MEP y CCL caigan, los títulos que cotizan en ambas monedas deberían encarecerse más en dólares que en pesos", estimó en un reciente trabajo.
También desde el extranjero, el banco de inversión J.P. Morgan detacó que la recompra de deuda “parece insuficiente para mejorar las perspectivas de acceso al mercado para Argentina en el corto plazo y su financiamiento sólo dispara más preguntas en medio del estrés en las reservas y el deterioro de las perspectivas para la cosecha del campo este año”.
Para los analistas de Moody’s, el Gobierno utilizará para la recompra “fondos que inicialmente estaban destinados para las importaciones de gas” y que considera quedaron liberados por las expectativas de “una factura de importación de energía más baja” , dado los menores precios internacionales.
Pero consideran esa apuesta como riesgosa dada la denominada “restricción externa” y tomando en cuenta que la tenencia de reservas netas del Banco Central (BCRA), aunque se han recuperado en los últimos meses, se mantiene en poco más de US$ 6.000 millones y el gobierno argentino acordó reforzarlas para cumplir con los objetivos del acuerdo vigente con el FMI.
“La acumulación de reservas sigue siendo un desafío como resultado de las exportaciones más débiles que han llevado a la introducción de nuevas restricciones cambiarias y tipos de cambio múltiples que son exacerbando las distorsiones en la economía”, acotaron desde Moody’s-