Inflación, pero también ajuste: condicionamiento del FMI para el Frente de Todos en 2023
"Hoy tenemos que gastar dólares en el pago de deuda y aceptar los condicionamientos del FMI", dijo la vicepresidenta Cristina Kirchner. Subsidios, asistencia social, entre los apuntados para llegar a un déficit del 2,5% del PBI en 2022 y al 1,9% del PBI el año que viene.
“Todavía falta mucho”, suelen responder los funcionarios del Gobierno cuando son consultados por las posibilidades y estrategias que tiene el Frente de Todos para reelegir en 2023. La principal preocupación está puesta en los salarios, con una fuerte pérdida acumulada en los últimos años por los altos niveles de inflación. Pero el principal condicionamiento que tiene la gestión actual viene por el lado del ajuste necesario para cumplir con lo firmado con el FMI.
En su discurso de este viernes, la vicepresidenta Cristina Kirchner se refirió a la pérdida en la participación de los trabajadores en el PBI respecto a la de las empresas. “Absolutamente regresiva”, calificó. Pero también señaló que "esto no empezó con el gobierno del 2019, vamos a decirlo. Esto empezó con un gobierno que decidió endeudar una vez más a la Argentina y hoy tenemos que gastar dólares en el pago de deuda y aceptar los condicionamientos del FMI".
Allí radica el problema que enfrenta el Gobierno para aplicar políticas expansivas de cara al período electoral del año que viene. En particular, el compromiso con el Fondo para reducir el déficit del 2,5% de este año, que ya es exigente, al 1,9% del PBI en 2023. El informe realizado por los técnicos del organismo da pistas de por dónde vendrán los recortes: subsidios, asistencia social, salarios públicos y cobros anticipados de impuestos.
En las proyecciones publicadas en el documento de los técnicos del organismo se indica una baja de subsidios del 0,4% del PBI, la cual peligra ante el retraso de aplicación de la segmentación tarifaria por ingresos y consumo en materia de energía. Transporte y agua tienen un rol menor allí. Las compras de bienes y servicios deberían caer 0,4% del PBI y las jubilaciones 0,3% del PBI. Por último, las transferencias a provincias y la asistencia social sufrirían un recorte del 0,2% y 0,1% del producto, respectivamente.
La consultora Econviews aseguró que “el año que viene el ajuste deberá continuar”. “El recorte más grande está proyectado que sea en la asistencia social (-0.7%) donde deberá dejar de entregarse bonos de emergencia, eliminar superposiciones de planes y fomentar la entrada al mercado laboral”, detallaron.
“En segundo lugar, se espera que los subsidios caigan 0.5% del PBI, lo cual no es imposible si se aplica la segmentación. Además, para lograr esta tarea el Gobierno se compromete a reducir significativamente los subsidios a usuarios comerciales y a eliminarlos por completo en 2024”, concluyó Econviews.