Guzmán busca inversiones para Vaca Muerta y permiso para importar más gas de Bolivia
El ministro parte a San Pablo, donde se reunirá con empresarios y su par de Energía, Bento Alburquerque. Luego en Brasilia hablará con el de Economía, Paulo Guedes.
El ministro de Economía, Martín Guzmán, partirá esta mañana a Brasil, donde se reunirá con funcionarios y empresarios de ese país, en búsqueda de inversiones, en especial para la explotación de Vaca Muerta, y la posibilidad de que el Gobierno de Jair Bolsonaro le venda el gas que no utilice de su compra a Bolivia.
Guzmán se reunirá en San Pablo con el ministro de Minas y Energía brasileño, Bento Albuquerque, para, si ese país importa menos gas desde Bolivia en invierto, ese “sobrante” pueda ser comprado por Argentina.
El Gobierno nacional anunció este jueves un acuerdo que “refleja un nuevo régimen de entrega garantizado de 14 (millones de metros cúbicos diarios) y priorizando en función de la disponibilidad volúmenes adicionales en el período de invierno”.
Brasil ya adquirió gas a Bolivia, pero tal vez no utilice todo el fluido que adquirió a fines del año pasado, por lo cual, podría venderle ese suministro "sobrante"
También en San Pablo, Guzmán tiene previsto reunirse con casi 200 empresarios de distintos sectores, entre ellos, energético y minero, a los que intentará convencer de invertir en Vaca Muerta, y de los rubros agroindustrial, automotriz, y de la economía del conocimiento, con potencial de invertir en la Argentina.
En la reunión con los empresarios, Guzmán, quien estará acompañado por el embajador en Brasil, Daniel Scioli y por el cónsul en ese país, Luis Klecker, expondrá sobre las perspectivas económicas y de inversiones del país, pero especialmente, buscará inversiones para desarrollar Vaca Muerta.
El encuentro fue organizado en conjunto por la embajada argentina y la Federación de Industrias del Estado de San Pablo (FIESP), una de las cámaras empresarias más importantes de Brasil.
Más tarde, Guzmán se trasladará a Brasilia, donde mantendrá una reunión con su par de Economía, Paulo Guedes, para avanzar en la agenda económica bilateral, en la que el gobierno de Jair Bolsonaro se queja de las continuas trabas al comercio que impone Argentina en sectores como el textil o siderúrgico.