El ministro de Economía, Luis Caputo, escuchó lo que quería escuchar: al representante del Fondo Monetario Internacional (FMI), Rodrigo Valdés, alabando las medidas adoptadas, en un hotel del centro porteño, y ante medio millar de empresarios .

"Desde el FMI creemos que estas medidas traerán prosperidad al país”, dijo Valdés, quien fuera ministro de Hacienda de Chile (2015-2017) con Michelle Bachelet como presidenta.
El representante del Fondo, quien revisa el “caso argentino” destacó algunos hitos de los primeros meses de gestión de Javier Milei, como el superávit fiscal logrado en enero y febrero, algo que se alcanzó “por primera vez en más de una década”. 

Junto con esto, “las reservas internacionales se están recomponiendo, la inflación baja más rápido de lo que nosotros estimábamos y la brecha cambiaria y el riesgo país siguen cayendo”.
Sin embargo, Valdés advirtió que la herencia fue pesada y el camino a la estabilización nunca es fácil”.

El FMI no cambia su posición: celebra las medidas pero advierte los riesgos sociales

Por eso, como hizo la sub directora del FMI, Gita Gopinath, alerto sobre la necesidad de “apoyar a los más vulnerables, para que el peso del ajuste no caiga desproporcionadamente sobre las familias trabajadoras”.

Este mensaje, se dio durante la presentación de Valdés en el encuentro IEFA Latam Forum, que se realizó hoy en el hotel Four Seasons de Buenos Aires. 

Valdes, quien mantendrá una reunión con Caputo, brindó una conferencia en la inauguración del encuentro, y luego evitó responder preguntas de la prensa. “Las nuevas autoridades están decididas a implementar un plan de estabilización ambicioso para restablecer el orden macroeconómico. Es un plan centrado en un ancla fiscal fuerte, que elimina completamente el financiamiento del Banco Central al Gobierno e implementa políticas para reducir la inflación”, dijo Valdés, quien destacó que el FMI “comparte la visión de las autoridades” sobre una economía más orientada al mercado”.