El comercio entre Argentina y Brasil tocó el nivel más bajo desde el 2004
El intercambio bilateral durante julio ascendió a US$ 1.255 millones, con una fuerte caída del 39% de las exportaciones argentinas a Brasil.
Desde la redacción de DATA CLAVE .- El comercio con Brasil alcanzó en julio a los US$ 1.255 millones, el nivel más bajo desde el 2004, con un resultado deficitario de US$ 150 millones para Argentina.
Las exportaciones solo alcanzaron US$ 550 millones, con una caída interanual del 39%, contra importaciones que alcanzaron a US$ 700 millones, con una merma del 19% respecto del 2019, informó hoy la consultora Ecolatina en base a datos oficiales de Brasil.
Dos factores explican principalmente esta reducción del comercio. En primer lugar, la apreciación del tipo de cambio real bilateral con Brasil, que actualmente muestra un atraso cercano al 20%. En segunda instancia, “el tipo de bienes que le enviamos a la primera economía sudamericana, muchos de ellos manufacturas de origen industrial -automóviles y autopartes, por ejemplo-, usualmente relacionados con los rubros ´no esenciales´, de peor performance que el resto de las ramas de actividad en medio de esta pandemia”.
Además de la apreciación cambiaria, la otra novedad respecto al año pasado fue la entrada de la economía brasileña en recesión, estimada en 9% por la CEPAL, que redujo drásticamente su demanda de productos argentinos 32% interanual. En tanto que las ventas desde Brasil a nuestro país cayeron “solamente” 14%. Como resultado, el flujo comercial cayó casi 30%.
Con estos números, en el acumulado anual se verifica un déficit de US$ de 170 millones, marcando un deterioro importante respecto al superávit de, también, US$ 170 millones alcanzado entre enero y julio de 2019.
Ecolatina advirtió que a partir de que ambas economías se vayan normalizando, los niveles de caída del comercio bilateral se van a ir reduciendo. En este sentido, “proyectamos que el año podría cerrar con una retracción de nuestras exportaciones a Brasil no menor al 20% en tanto que nuestras importaciones desde este país retrocederían cerca de 10%. Como resultado, se borraría el superávit de US$ 750 millones alcanzado en 2019, arrojando un saldo bastante más parecido al equilibrio”, explicó la consultora.