La consultora Equilibra apuntó un “escenario base” para lo que resta del año en el que el Banco Central tendrá “una pérdida de reservas netas de U$S1.200 millones”, con menor intervención oficial en el mercado de bonos, aún contabilizando los desembolsos remanentes de préstamos de los organismos multilaterales.     

La casa de estudios económicos que integran Diego Bossio y Martín Rapeti destacaron que, “existe mayor tensión cambiaria respecto a la situación previa a las PASO de septiembre: brechas más amplias, menos reservas, caída real de depósitos, mayor desbalance monetario y profundización de la apreciación cambiaria”.

"En este marco el stock de reservas netas para sostener el ritmo de crawling peg (ajuste gradual del tipo de cambio) actual es muy limitado, unos U$S4.650 millones”. Por esto “el gobierno tendrá que salir lo antes posible del actual esquema de retraso cambiario, y cabría esperar un aumento marginal de tasas para acompañar el proceso”, agregó el informe.

La consultora también apuntó a que el ingreso de agro-divisas en el último bimestre del año “se ubicará un 20% por encima al de un año atrás, unos U$S700 millones adicionales, apenas unos U$S720 millones por debajo del muy buen registro del bimestre septiembre-octubre”, pero no alcanzará a calmar al demanda de divisas de importadores y operadores del mercado financiero.

“Las mayores expectativas de devaluación y la creciente demanda de cobertura ante la incertidumbre respecto al rumbo que tomará la política económica a partir del lunes, han tensionado con fuerza el mercado cambiario”, señaló Equilibra.

“La gran incógnita es si habrá un ‘giro de timón’ que contribuya a alinear expectativas y cuánto de la presión cambiaria persistirá hasta diciembre y principios del próximo año. Estas dos cuestiones son claves para esbozar la trayectoria que podría tomar el frente cambiario en las próximas semanas”, destacó el informe.