Bolsillos flacos: los argentinos pueden comprar 20 kilos menos de carne que en 2020
De acuerdo a un informe de Rosgan esa cifra asciende a 32 kilos si se copara con el promedio de los últimos diez años. Los precios de la carne cerraron el 2021 con una suba de 53,7%, 2,8 puntos sobre la inflación general del 50,9%.
La caída del poder adquisitivo de los ingresos tiene su correlato en la caída en de la capacidad de compra de productos que históricamente han sido representativos en el consumo de los ciudadanos. Este es el caso de la carne vacuna, ya que en los últimos años los argentinos cada vez pueden comprar menos cantidad con su dinero.
De acuerdo a un informe del Mercado Ganadero de Rosario (Rosgan), el ingreso medio en Argentina, según datos del Indec al segundo trimestre del año pasado, era de $45.000, equivalente a 67 kilos de carne vacuna.
En igual período de 2020, la misma equivalencia arrojaba 87 kilos de carne. Esto quiere decir que el poder de compra del ingreso medio en Argentina se erosionó 20 kilos en el último año y 32 kilos si lo comparamos con el promedio de compra de los últimos 10 años (99 kg).
Sin embargo, el consumo per cápita en 2021 apenas se contrajo en 2,5kg respecto de los 50kg per cápita consumidos en 2020 y 8,5kg si lo comparamos con el promedio de los últimos 10 años (56,7kg).
“Esto demuestra que el consumidor argentino ofrece una gran resistencia a la baja en la ingesta de carne vacuna a pesar de la pérdida en el poder de compra que viene experimentando en los últimos años”, resaltó Rosgan.
Aumento de precios
En cuanto a la dinámica que se espera para 2022, el precio promedio de los distintos cortes de carne vacuna aumentó 2,5% en enero último por debajo de la inflación esperada por el mercado y el Gobierno, en torno al 3,8% para el primer mes del año, y revirtió así la tendencia de noviembre y diciembre cuando los valores triplicaron al Índice de Precios al Consumidor (IPC).
De esta forma, la carne en el mostrador se ubicaría debajo de la suba general de precios por primera vez desde octubre del año pasado. El REM antecede al IPC del Indec que se publicará el próximo martes 15 de febrero.
Según el Instituto de Producción de Carne Vacuna Argentina (Ipcva), el incremento de enero presenta una desaceleración respecto a las subas de diciembre y noviembre pasado, cuando los precios saltaron 9,7% y 10,8%, respectivamente, más que triplicando la inflación general de dichos meses.
De acuerdo con el informe de Rosgan, el repunte de noviembre y diciembre de más de 20 puntos porcentuales, responde al "atraso acumulado contra la inflación" en los meses anteriores.
Entre julio y octubre del año pasado, la carne vacuna no sólo no aumentó por encima de la inflación (como había sido la tendencia en la primera mitad de 2021), sino que sus precios acumularon un descenso de 2,9%.
La caída en los precios de la carne se había dado luego de que el Gobierno implementara limitaciones a su exportación en junio pasado permitiendo exportar un volumen equivalente al 50% de lo que se enviaba al exterior en 2020.
Este esquema, luego de sucesivas flexibilizaciones, fue eliminado al comenzar el año en curso, manteniendo la prohibición para despachar siete cortes parrilleros de consumo interno.
Pese al descenso en el segundo semestre del año, los precios de la carne cerraron el 2021 con una suba de 53,7%, 2,8 puntos porcentuales sobre la inflación del 50,9%. La relativa estabilidad de los valores en enero puede responder a un "patrón de comportamiento" estacional, explicó Rosgan.
"A partir de marzo y hasta mediados de año, el precio de la carne vacuna acumula las mayores subas mensuales mientras que, durante el segundo semestre, los ajustes suelen ser menores al promedio, situación que en varios años deriva en retrasos de precios", indicó la entidad rosarina.
Luego, hacia fin de año, se suele dar el "segundo periodo de mayor ajuste anual", el cual comenzó, según el Rosgan, a "instalarse con mayor firmeza en los últimos años".
Asimismo señaló que, pese a la falta de hacienda gorda para abastecer el mercado interno -por motivos que incluyen el bajo ingreso a feedlots, el costo de alimentación y las menores tasas de conversión-, dicha problemática aún no parece haberse trasladado a los precios en el mostrador, debido al menor consumo general de carne.
En ese sentido, y con el objetivo de morigerar los precios al consumidor, el Gobierno lanzó el programa Cortes Cuidados, que comenzó a regir este lunes. El programa, que estará vigente durante todo 2022, involucra la comercialización de siete de los principales cortes de carne vacuna a precios acordados en todo el país.
Los cortes podrán ser encontrados en las grandes cadenas de supermercado (punto de venta que, de acuerdo al Ipcva, registraron las mayores subas en enero, al promediar el 6%); y las carnicerías adheridas a la Unión de la Industria Cárnica Argentina (Unica) y el consorcio de exportadores de carnes argentinas ABC.