"Renta inesperada": las medidas que anunciará el Gobierno para contener los ingresos de trabajadores informales y monotributistas
La inflación escaló al 16,1% en el primer trimestre, la más alta en tres décadas. La mirada oficial está puesta en reforzar los ingresos de los sectores más castigados: trabajadores informales y monotributistas. La intención de gravar la "renta inesperada" y los límites que impone el acuerdo con el FMI.
Según confirmaron ante Data Clave fuentes del Ministerio de Economía, el Gobierno anunciará esta tarde, cerca de las 18, medidas para “contener el ingreso de los trabajadores” frente a una inflación que acumuló 16,1% en el primer trimestre, la más alta en las últimas tres décadas. Si bien todavía se están definiendo los lineamientos de la comunicación, desde la Casa Rosada señalaron que es “altamente probable” que el presidente Alberto Fernández esté a cargo del anuncio.
El titular del Palacio de Hacienda, Martín Guzmán, postergó a esta noche su viaje a las reuniones de primavera del FMI y del G20 en Washington, que estaba planeado para ayer, para terminar de delinear las medidas que harán frente a la pérdida del poder adquisitivo de los salarios, con principal foco en “los sectores más desprotegidos” según indicaron las fuentes. Guzmán estuvo delineando el paquete junto a su equipo en el retiro que hicieron los últimos días en Chapadmalal.
El equipo económico tiene pensado gravar la “renta inesperada” a los beneficiados por el impacto de la guerra en Ucrania en los precios de materias primas a través de una suba en la alícuota del impuesto a las Ganancias de la categoría más alta. Los apuntados serán las empresas del agro, pero también de minería y energía, entre otros rubros.
"Hoy hay ganancias inesperadas que no son fruto de inversión adicional o más contratación de empleo sino que no son fruto de un shock. Estamos buscándole la vuelta", había dicho la semana pasada el ministro de Economía en diálogo con C5N.
Los recursos que salgan de ese gravamen servirían para dar una transferencia de “emergencia” similar al IFE que se dio para 9 millones de personas en 2020, pero acotado a trabajadores informales y monotributistas de las categorías más bajas.
La cifra todavía está en estudio y por estas horas todavía se están definiendo los detalles. En cuanto a la posibilidad de un bono para los trabajadores privados, desde el Ministerio de Trabajo dijeron a Data Clave que “hasta la semana pasada estaba descartado” y la estrategia era continuar incentivando la “negociación paritaria por sector”.
Si bien el promedio de los salarios se recuperó en 2021, corrieron por detrás de la inflación todo el año y los informales perdieron. La preocupación principal del Gobierno es el costo de los alimentos, que según el Indec acumularon un alza de 20,1% sólo en el primer trimestre del corriente año.
En el caso de los privados registrados la caída promedio fue de 2,3% pero de los informales escaló al 7,1%, según repasó el centro Cifra de las CTA. Un análisis de la consultora PxQ destacó que los salarios acumulan una pérdida de 20,2% de su poder adquisitivo desde 2016. Los empleos no registrados son quienes sufrieron las peores consecuencias (-31,9%), seguido públicos (-20,5%) y privados registrados (-15,3%).
El principal problema del Gobierno para avanzar en un gravamen a la renta inesperada se encuentra en el Congreso, ya que esa suba debe ser aprobada en ambas Cámaras. El oficialismo no tiene mayoría y deberá negociar con Juntos por el Cambio que ya anticipó que no acompañaría “ninguna suba de impuestos”.
La necesidad de una mayor recaudación tiene que ver también con el acuerdo con el FMI, que prevé una reducción del déficit fiscal primario del 3% del PIB en 2021 al 2,5% del PIB este año. El entendimiento pone un límite claro al margen del Gobierno para dar asistencia. Este será uno de los temas que tratará Guzmán en su reunión con el organismo, aunque difícilmente pueda conseguir modificar la meta establecida.