El FMI aprobó las metas pactadas y subieron las acciones y los bonos
El organismo otorgará US$ 800 millones, pero pide una política cambiaria “más flexible” y reducir las restricciones. El secretario de Finanzas destacó que se logró esta aprobación a partir del "sobre cumplimiento de metas” y “el avance significativo realizado en mejorar el apoyo a los sectores más vulnerables”.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) aprobó la octava revisión del programa vigente con Argentina por lo que realizará un nuevo giro por alrededor de US$ 800 millones que el Gobierno destinará al pago de la deuda que tiene con ese organismo.
El Fondo destacó a través de un comunicado el “gran progreso” llevado adelante por el gobierno argentino y dijo que se alcanzaron resultados “mejores de lo esperado”. No obstante advirtió que “es necesario que continúen realizándose esfuerzos para mejorar la calidad y la equidad de la consolidación fiscal, afinar los marcos de política monetaria y cambiaria”, además de “atender los cuellos de botella para el crecimiento”.
El anuncio de la aprobación hizo que aumentaran los precios de las acciones de empresas argentinas que operan en Nueva York alrededor del 3 %, al igual que los valores de los bonos de la deuda estatal, todo lo que se vio reflejado en una baja de 1,36% en la tasa de Riesgo País.
El secretario de Finanzas, Pablo Quirno, destacó a través de su cuenta en la red social X que se logró esta aprobación a partir del “sobre cumplimiento de metas” y “el avance significativo realizado en mejorar el apoyo a los sectores más vulnerables”.
Es que el FMI destacó que “a pesar de heredar una situación económica y social altamente compleja, la firme implementación del plan de estabilización de las autoridades –basado en una sólida ancla fiscal, la ausencia de financiamiento monetario y la corrección de precios relativos– ha permitido avanzar más rápido de lo previsto en el restablecimiento de la estabilidad macroeconómica y reencauzar firmemente el programa”.
Además, apuntó a que la política monetaria “evolucionará para seguir anclando las expectativas de inflación y la política cambiaria se hará más flexible, al tiempo que se seguirán reduciendo las restricciones y controles cambiarios a medida que las condiciones lo permitan”.