A las 6,30 del jueves 3, Sergio Massa mantuvo un encuentro virtual por zoom con autoridades de un país extranjero, según confió esa misma noche, después de las 22, ante unas 2.000 personas que lo escuchaban en Parque Norte.

Entre el madrugón y la cena, el ministro de Economía y candidato de Unión por la Patria siguió con la agenda que tenía armada en la provincia de Córdoba, una visita a un terreno hostil, donde Alberto Fernández obtuvo sólo el 29% de los votos en las elecciones generales de 2019.

Está claro que la intención de Massa es superar ese umbral ahora en las PASO y en las comicios de octubre. Tiró centros para atraer a los peronistas cordobeses, mayoritariamente anti k, y se trajo el respaldo de más de 50 gremios, que decidieron armar en la provincia la mesa sindical Massa presidente.

Massa no les dijo a los comensales que lo escuchaban en Parque Norte con quienes habló el jueves tan temprano. Pero es probable que haya sido con las autoridades de Qatar con los cuales acordó un préstamo de DEGS para afrontar el vencimiento con el FMI que operó el viernes.

La cena del jueves fue la culminación de una jornada agotadora para el ministro y candidato, que durante las 24 horas se desdobla en sus dos condiciones. Sin embargo, era la medianoche y Massa seguía haciendo selfies y videos con todos los que se acercaban.

El ministro fue el orador principal de la cena organizada por la Asamblea de Pequeños y Medianos Empresarios. El anfitrión fue el diputado nacional y referente del movimiento cooperativo Carlos Heller.

“Terminó de hablar y estuvo más de una hora y media saludando a la gente. Fue muy impresionante. Tiene una energía muy positiva y contagiosa”, dijo a Data Clave un empresario Pyme de Lomas de Zamora que estuvo en la cena.

Antes habló el jefe de Gabinete y candidato a vicepresidente, Agustín Rossi. También estuvieron el ministro de Interior y candidato a senador nacional, Eduardo “Wado” de Pedro, y el secretario de Industria, José Ignacio de Mendiguren.

Entre las mesas también circulaba sacándose fotos con los empresarios la analista política Mayra Arena, quien iba a integrar la lista de candidatos a diputados nacionales con el espacio de Daniel Scioli. También se lo vio al ex senador radical Nito Artaza, quien también iba ser candidato a jefe de gobierno porteño junto a Scioli. Una señal de que ese espacio apoya sin vueltas la candidatura de Massa.

Antes de escuchar a Massa, los pequeños y medianos empresarios pagaron tarjetas de 30.000 pesos. Y comieron como entrada burrata con jamón crudo, pera y cherrys; de plato principal ojo de bife con cremoso de pure y de postre tartin con helado.

El ojo de bife fue el plato principal.

Quedaron satisfechos con el menú y contentos con las palabras del candidato, que les prometió simplificar el tema impositivo. “Argentina tiene que ir a un nuevo pacto fiscal porque no es posible que comerciantes PyME paguen una, dos y tres veces el mismo impuesto sobre un mismo producto porque se lo cobra la Nación, la provincia y un municipio sobre la facturación o sobre el consumo. Tenemos que ir a un principio de simplificación tributaria”, anunció entre aplausos.

También dijo que es necesario "encontrar un mecanismo de garantía para que un pyme no sienta que cuando toma un laburante pone en riesgo al momento del despido la hipoteca de su casa. 
Tenemos que resolverle a la PYME que tomar un laburante no se transforme en la espada de Damocles que termina generando la pérdida de la empresa, de la casa".

“El otro desafío que tenemos es animarnos a transformar los programas sociales en empleo genuino y tratar de ir absorbiendo con mecanismos de puente al empleo”, agregó.

Los empresarios se fueron con la sensación de que el candidato entiende cuáles son los problemas del sector y el aporte que realizan a la economía argentina. “Me quedó la sensación de que está en carrera, que las elecciones se pueden ganar”, confió uno de los asistentes, quien después de la cena se fue convencido de votar la fórmula que encabeza Massa en las PASO del 13 de agosto.