La reelección indefinida sigue siendo uno de los temas centrales detrás de cada movimiento que se genera dentro de la política nacional, provincial y ahora también en lo referido a CABA. Sucede que con el salto de Ariel Sujarchuk a Nación y de Jorge Macri a CABA ya son 11 los jefes comunales que, al pedir licencia de sus cargos, y pese a haber sido electos en dos oportunidades consecutivas en sus distritos, podrían evitar la ley que prohíbe la reelección indefinida y volver a presentarse en 2023 en caso de necesitarlo.

Sujarchuk y Macri se suman a un selecto grupo de 9 intendentes que ya tienen cargos en Nación y Provincia y que buscan expandir su currículo con el fin de potenciar sus aspiraciones futuras. Un salto que, más allá de la decisión que tomen en el futuro, expone también la necesidad de Nación, Provincia y CABA por sumar territorialidad. Lo que se dice un win win.

Es que más allá de la decisión que tomen en 2023, se sabe, la mayoría de los ahora funcionarios siguen manteniendo el control de sus distritos algo que, en definitiva, les genera más poder. Y en su traducción económica: más caja para los suyos.

“Dentro de la ley, todo. Si no cumplen los dos años pueden volver a presentarse. Pero yo no veo que Sujarchuk o Katopodis busquen volver a sus distritos después de asumir cargos de tanto valor. En San Martín, (Fernando) Moreira está enfocado en la gestión y pensando a futuro con él como intendente”, le dice a Data Clave el diputado bonaerense del Frente Renovador, y creador del proyecto de ley para ponerle fin a la reelección indefinida, Rubén Eslaiman.

Ayer, Alberto Fernández designó a Sujarchuk como presidente del Ente Nacional de Control y Gestión de la Vía Navegable, un puesto para nada menor, teniendo en cuenta que el jefe comunal le había apuntado con fuerza al gobernador Axel Kicillof tras las elecciones.

La llegada de Sujarchuk a Nación causó sorpresa debido a que quien gestionó su arribo fue el propio Sergio Massa a través de la cartera de Transporte que maneja Alexis Guerrera. Es que el líder del Frente Renovador maneja un buen vínculo con el gobernador, quien había sido sindicado por el intendente de Escobar como el principal responsable de la derrota en las PASO.

De esta manera, Sujarchuk asumirá el control de la administración de la vía navegable, mientras el Ente avanza en el armado de los pliegos para una nueva licitación de largo plazo que administrará las obras de dragado y balizamiento en la Hidrovía. Trabajará coordinado con el sector público y las provincias.

“Aun en uso de licencia seguiré comprometido como siempre conduciendo el destino del partido de Escobar, participando de la toma de decisiones del día a día, ahora con una doble responsabilidad, pero sin descuidar ninguna de las obligaciones”. El ahora funcionario jugará a dos puntas pese a que el cargo oficial quedará en manos de Carlos Ramil.

Salto pactado

Quien también oficializó su licencia fue el jefe comunal de Vicente López, quien desde ayer se puso al frente del ministerio de Gobierno de CABA. Un acuerdo prelectoral que Jorge Macri y el máxima autoridad porteña, Horacio Rodríguez Larreta, habían pactado en la previa de las PASO para evitar la interna dentro del PRO y allanarle el camino a Diego Santilli como candidato a diputado.

“Debe haber un acuerdo en nuestro espacio político de posponer discusiones por candidaturas por al menos un año. No hay ninguna duda de que nuestro espacio tiene vocación de gobernar el país en 2023. La sana competencia interna nos va a llevar a mejorar, pero tenemos que consolidar las gestiones, porque al final del día la gente vota eso. No es momento de nombres propios”, sostuvo Macri ayer.

Sin embargo, su movimiento político responde a la gran plataforma pensada para intentar ser el candidato del PRO para la gobernación en 2023, sin descartar un crecimiento en CABA que podría abrirle otro camino. Claro, al haber pedido licencia antes del 10 de diciembre, si nada sale según lo planeado, Macri podrá volver a aspirar a presentarse para ser intendente de Vicente López.

El club de los intendentes

Sujarchuk y Macri no serán los únicos. Ya son nueve los intendentes que pidieron licencia para ocupar roles en Nación y Provincia. Quien dio el primer paso fue Gabriel Katopodis (San Martín), como ministro de Obras Públicas; y luego se sumaron Juanchi Zabaleta (Hurlingham), al frente del Ministerio de Desarrollo Social; Jorge Ferraresi (Avellaneda), a cargo de Desarrollo Territorial; Santiago Maggioti (Navarro), número dos de Ferraresi; y Francisco Echarren (Castelli), como director de Obras del Ministerio de Transporte.

En Provincia, los dos primeros en llegar fueron Martín Insaurralde (Lomas de Zamora) y Leo Nardini (Malvinas Argentinas), como jefe de Gabinete y ministro de Infraestructura, respectivamente. Los siguieron Hernán Y Zurieta (Punta Indio) y Héctor Olivera (Tordillo), como director de Vialidad y Autoridad del Agua.

Pero no serán los únicos. La lista de quienes tendrán la opción de poder renovar su mandato en 2023 si así lo requieren se extiende hasta Mariano Cascallares (Almirante Brown), Carlos Puglelli (San Andrés de Giles) y Claudio Rossi (Rojas), quienes fueron electos como diputados bonaerenses. Y Walter Torchio (Carlos Casares) y Érica Revilla (General Arenales), que asumirán como senadores.

En total serán 16 los jefes comunales que podrán volver a presentarse en 2023 si así lo desearan. Habrá que ver en qué situación está la ley que prohíbe la reelecciones indefinida. Según pudo averiguar Data Clave, podría haber sorpresas antes de fin de año.