La semana parlamentaria arrancó con un panorama complejo. Este martes, la Comisión de Presupuesto y Hacienda, presidida por José Luis Espert, iba a intentar avanzar con el dictamen del Presupuesto 2025 pero la reunión fue suspendida. "Tras dos meses de trabajo, no hemos llegado a un acuerdo común para sostener el déficit cero por eso suspendimos la comisión, la voluntad es seguir trabajando para lograr consenso y tener Presupuesto", sostuvo el legislador.

"Si en las próximas semanas hubiera avances el Poder Ejecutivo evaluará si es necesario convocar a sesiones extraordinarias", agregó.

Bajo este panorama, las chances de lograr consenso parecen desvanecerse: mientras los libertarios mantienen una postura rígida, los gobernadores aliados exigen respuestas que aún no llegan, y las tensiones suben con la revelación de los Adelantos del Tesoro Nacional (ATN) distribuidos este año.

Los números no mienten: en 2024, el Ejecutivo entregó apenas $40.800 millones en ATN, una caída estrepitosa respecto de 2023. Más llamativo aún es que solo nueve provincias recibieron esos fondos, todas cercanas al oficialismo libertario. Este dato encendió alarmas tanto en los despachos de los gobernadores como en los bloques opositores.

Para algunos, los ATN no solo evidencian discrecionalidad, sino también una estrategia política. Un ejemplo reciente: en noviembre, el Gobierno giró $11.500 millones exclusivamente a Catamarca, Misiones y Tucumán, tres distritos cuyos legisladores resultaron clave para frenar iniciativas de la oposición, como el rechazo al DNU de canje de deuda.

Mientras tanto, el clima entre los gobernadores está al rojo vivo. Uno de ellos, afectado por la falta de fondos, aseguró que el Presupuesto 2025 debe aprobarse: "Si no tiene presupuesto, el presidente se va a victimizar. Va a decir que no le damos herramientas y seguirá manejando la plata como quiera."

Por su parte, el peronismo alineado con Cristina Fernández de Kirchner tampoco parece dispuesto a dejar al oficialismo sin ley de leyes en un año electoral. Aunque plantearán sus reparos en el debate, no buscarán bloquear la aprobación en la Cámara Baja.

Los más complicados son los gobernadores radicales y del PRO, quienes, tras marcar su postura en un comunicado conjunto la semana pasada, todavía esperan una señal del Gobierno. Sin embargo, en más de una ocasión, sus legisladores han terminado votando en línea con la estrategia oficialista, pese a los discursos críticos.

En paralelo, el debate sobre los ATN sigue sumando capítulos. Los Adelantos del Tesoro Nacional, una herramienta utilizada históricamente para calmar tensiones entre Nación y provincias, se han convertido en el principal detonante de la puja política. Los envíos discrecionales de recursos, junto con la caída generalizada en el monto total girado, exponen los desafíos de una gestión que parece jugar al límite en su relación con las provincias.