En el marco de la reacción estudiantil contra el veto del presidente Javier Milei a la Ley de Financiamiento Universitario, la comunidad educativa debate en asambleas la continuidad del plan de lucha en defensa de la educación pública. 

El estudiante y secretario de la Federación Universitaria Argentina (FUA), Agustín Romero, reveló que hoy se celebrarán más de 30 asambleas en todo el país para definir acciones concretas que se sumarán a las tomas de facultades en curso contra el recorte de la administración libertaria. 

“Pueden ser ruidazos, cacerolazos educativos, clases públicas en los diferentes horarios, y empezar a plantear interfacultades para unir todas las luchas, todas las facultades en un mismo plan de lucha para preparar una nueva marcha educativa”, enumeró en declaraciones a Splendid 990. 

A días de la multitudinaria marcha universitaria, Romero definió que se trató de una acción política en respuesta a los ataques de “carácter político” del Gobierno. Para el titular de la FUA, las embestidas libertarias responden a que las altas casas de estudio son “fuente de pensamiento crítico y a su vez, un derecho accesible para todo el conjunto que nunca se privatizó”. 

“El Gobierno tiene un claro eje de ataque a todo lo público, por eso nuestra respuesta es política”, afirmó al tiempo que pidió auditar a “todos los traidores que votaron aprobar un nuevo préstamos con el Fondo Monetario Internacional (FMI) que los tiene a todos en el Gabinete”. 

Tras los reclamos del Ejecutivo para que las altas casas de estudio sean auditadas, el referente estudiantil afirmó: “Ya se auditan las universidades a través de la AGN que depende del Congreso. No puede meterse el Ejecutivo a auditarnos porque sino es un chiste”.

Asimismo, subrayó que Milei apuesta a privatizar la universidad pública para “convertirla en un modelo que esté al servicio del mercado, de los propios amigos de Milei y sus intereses y no al servicio de las poblaciones”, y rechazó las críticas a los estudiantes, docentes y no docentes.

Por otra parte, el decano de la Facultad de Ciencias Exactas de la UBA , Guillermo Durán aseguró que la decisión del gobierno "no es un tema fiscal, es una decisión política desfinanciar a las universidades públicas. Es una absurdo lo que dice y se demuestra fácil que es falso. Dos tercios pertenecen a los estratos más bajos".

"Nos condena a un país sin desarrollo y tendremos que seguir reclamando en las calles en los laboratorios", agregó Durán en declaraciones a FM Delta.