Una comitiva de diputados bonaerenses viajó en las últimas horas a Bahía Blanca con el fin de interiorizarse sobre la oferta que Bahía Blanca puso sobre la mesa para ser la receptora de la plata de GNL que YPF y Petronás desarrollarán en un futuro cercano con una inversión de al menos 30 mil millones de dólares. Sin embargo, las cosas no salieron según lo planeado por los organizadores.

El objetivo de Unión por la Patria era mostrar las cualidades de la ciudad para llevar adelante el megaproyecto más importante en la historia del país. Para eso viajaron el presidente de la Cámara baja, Alejandro Dichiara, junto al titular del bloque de UxP, el camporista Facundo Tignanelli, los representantes del Frente Renovador, Alexis Guerrera y Rubén Eslaiman, quien está a cargo de la bancada de Acuerdo Cívico-UCR+GEN, Claudio Frangul, y el dirigente de Unión, Renovación y Fe, Fabián Luayza.

En medio de la visita, los legisladores se enteraron de lo que fue la decisión YPF y Petronas y debieron recalcular sobre sus pasos ante un golpe que el oficialismo bonaerense no se esperaba, al menos, en lo inmediato pese a que había ciertos indicios que llevaban a pensar que Río Negro podría quedarse con la compulsa.

En ese marco, Luayza dio a conocer en las últimas horas su parecer: "La decisión de Milei de instalar la planta en Rio Negro responde más a caprichos políticos que a cuestiones técnicas”, al tiempo que volvió a pedirle a los funcionarios nacionales y provinciales que actúen con “sentido común, piensen en la gente”.

El dirigente que comanda un bloque de 9 diputados y que fue electo a través de la boleta de LLA aseguró que “como bonaerense me apena que por rencillas políticas no se haya podido concretar la inversión multimillonaria en Bahía Blanca, que iba a generar unos 15 mil puestos de trabajo en forma directa durante la construcción y otros 5 mil en la etapa operativa”.

Y agregó: “Lo que quedó en evidencia es que la decisión de instalar la planta en Río Negro es producto de la falta de diálogo que existe entre Nación y la Provincia. Por este y por muchísimos otros temas más, es indispensable que Milei y Kicillof puedan trabajar en proyectos que permitan generar empleo y mejoren la producción. Es tiempo de pensar en la gente y no en los dirigentes”.

Además, aseveró que “es necesario hallar puntos de encuentro. Ya aprendimos que, con los extremos y la grieta, los únicos que se perjudican son los bonaerenses. Los debates que giran en torno a si la provincia debía o no adherir al RIGI, lo que provocaron fue únicamente una pérdida de tiempo y de oportunidades”.

Y añadió: “No puede ser que todo sea vivido como si estuviéramos en campaña, cuando claramente, no lo estamos. No se puede gobernar insultando al que piensa distinto, o por caprichos buscar castigarlo. Es tiempo que la política busque soluciones concretas a los tantos problemas que nos afectan como sociedad”.

Impacto bahiense

El golpe provincial sufrido por el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, no fue el único. El jefe comunal de  Bahía Blanca, Federico Susbielles, también recibió un duro revés. El intendente de UxP apuntó, sobre la idea de que se trató de una decisión política, que “eso lo vamos a ver en diciembre del año que viene, cuando este proyecto tenga que tomarse la decisión final de inversión". 

Y agregó: "El presidente de YPF dijo que iba a ir a buscar los compradores, cosa que todavía este proyecto no tiene. Hablaba de Alemania, de Francia, de India como destinos potenciales y después quiere buscar el financiamiento, Entonces, vamos a ver claramente en esa situación y en ese momento qué tan política fue esta decisión”.

Sin embargo, una de las declaraciones que más llamó la atención del alcalde fue cuando manifestó que "la impresión que uno tiene, llevo varios años en esto, es que había una decisión y un título tallado a piedra y que lo que hicieron fue confirmar ese título. Como hay una frase bíblica que dice si lo que vas a hacer es malo hazlo rápido, le dijo Jesús a Judas, me parece que eso es lo que hizo YPF”.