La trastienda de una UCR que aleja fantasmas de ruptura y se alinea con Patricia Bullrich

Ante la gran cantidad de especulaciones respecto al futuro de la Unión Cívica Radical (UCR), la cúpula central de dirigentes le dio un espaldarazo a Patricia Bullrich para las elecciones generales de octubre y ratificaron su pertenencia a la coalición de Juntos por el Cambio.

Los climas en la UCR no están para festejos y así lo entiende la base militante. El espacio perdió cierto protagonismo en cuanto a la discusión mediática y la participación de los radicales hoy se limita a ocupar lugares en las listas de diputados y senadores nacionales. Aún siendo el partido dentro del espacio que cuenta con mayor cantidad de intendentes y gobernadores a lo largo y ancho del país.

La contundente victoria de Bullrich sobre Rodríguez Larreta significó un retroceso para el partido centenario que tenía todas las fichas depositadas en la figura de Gerardo Morales y de la imagen de renovación dirigencial que encarna Martín Lousteau. El primero no será candidato a vicepresidente y el segundo perdió la interna con Jorge Macri en la Ciudad de Buenos Aires.

Estas situaciones llevaron a la base de militantes a replantearse si el futuro del radicalismo tiene sentido en Juntos por el Cambio. Incluso salieron algunas voces a querer marcar un contrapunto y hasta plantear la posibilidad de no acompañar a Bullrich en la campaña.Ha producido un debate hacia adentro, es un debate inconcluso, no está terminado", dijo Federico Storani, un histórico dirigente radical.

En la reunión de Mesa Ejecutiva de UCR, que encabezó Morales, asistió Lousteau y protagonizó Bullrich, participaron también su candidato a vice, Luis Petri; el presidente de la Convención Nacional radical, Gastón Manes; el gobernador de Corrientes, Gustavo Valdés, y la vicepresidenta del partido, María Luisa Storani. También estuvieron los legisladores Mario Negri, Luis Naidenoff, Karina Banfi, Soledad Carrizo y Carolina Losada.

La foto también fue una necesidad política para un Morales que hace pocos días viene de sacarse una foto en la provincia de Jujuy junto al ministro de Seguridad de la Nación, Aníbal Fernández. La reunión concretamente fue para abordar políticas de prevención de ilícitos y de la lucha contra el narcotráfico, pero puertas adentro se sorprendieron por la foto y la manera en que se manejó la difusión de la actividad.

El otro que necesitaba mostrarse orgánico fue Lousteau. Su participación política en los últimos días fue escasa y hasta tuvo que ordenar a su tropa de militantes de la Ciudad de Buenos Aires, desencantados con la idea de tener que militar a Bullrich en las próximas elecciones. Algunos comparaban esta situación con el escenario de 2015 que tuvo a La Cámpora teniendo que militar la candidatura de Daniel Scioli.

Según pudo saber Data Clave, previo a la reunión de Bullrich hubo diversas reuniones entre los radicales para ordenarse puertas adentro y marcar una estrategia clara rumbo a octubre. Aún con diferencias, ganó la idea de respetar el triunfo de las PASO y ordenarse detrás de la fórmula ganadora. “Queremos enfocarnos en la campaña para recuperar los votos que nos pongan en ballotage”, le dijo un dirigente a este medio.

La otra gran discusión que también involucra a Lousteau será de qué manera acompañará Evolución y todo el radicalismo en la campaña de Jorge Macri. Desde el entorno del exintendente de Vicente López esperan un gesto por parte de los radicales para la campaña y hasta la posibilidad de compartir recorridas de campaña.

“Faltan reuniones para definir los detalles, pero como parte de la coalición vamos a trabajar para que Juntos por el Cambio gane en 2023”, fue la respuesta de otro militante radical que tiene que ver con la militancia en la Ciudad de Buenos Aires.