Tras una mañana repleta de suspenso, la Cámara de Diputados ya está en sesión especial con el objetivo de debatir distintos proyectos que buscan poner en jaque al Gobierno por la promoción de la cripto $Libra. 

El pedido de sesión había sido impulsado por el bloque Democracia para Siempre, con la firma del presidente de la bancada Pablo Juliano a la cabeza y con el respaldo clave de Encuentro Federal, bloque de Miguel Pichetto, al que se sumó el diputado larretista del PRO Álvaro González.

La Libertad de Avanza coló a último momento un proyecto por Bahía Blanca y pretende intentar dar la discusión contra el proyecto de Victoria Tolosa Paz, pero el PRO manifestó que firmó el proyecto de Unión por la Patria y pretende que haya unanimidad en el tema.

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Operativo especial

En el contexto complejo, los alfiles de la oposición se guardaban un as bajo la manga. Habían ampliado el temario e incluyeron un proyecto de UP para declarar la emergencia en Bahía Blanca, que fue firmado por más de 60 diputados, incluidos la UCR y el PRO. Si la sesión se caía, el argumento de la oposición será que “blindaron a Karina en contra de Bahía”, según una fuente parlamentaria con acceso a los principales despachos de los convocantes.

En el gobierno habían movido sus fichas para frustrar la convocatoria y que una vez más la oposición naufrague por falta de quórum. No obstante, no hubo fisuras en Unión por la Patria y la UCR aportó dos diputados: Karina Banfi y Fabio Quetglas

Iniciada la sesión, la oposición enfrenta otro obstáculo: los proyectos sobre Libra no tienen dictamen y para aprobarlos se necesita una mayoría especial de dos tercios, algo virtualmente imposible. El plan B es empujar el emplazamiento de las comisiones de Asuntos Constitucionales y de Peticiones, Poderes y Reglamento. La idea es establecer una reunión para la semana próxima y que allí se emita dictamen. El objetivo de máxima es otra sesión en dos semanas para sellar el tema en el recinto.

En total temario de la sesión incluye varias iniciativas explosivas, desde un pedido de interpelación a Javier Milei, impulsado por el Frente de Izquierda, hasta pedidos de informes y citaciones a funcionarios clave como Guillermo Francos, Mariano Cúneo Libarona, Karina Milei y Manuel Adorni. Además, se sumó un pedido de informes del radical Rodrigo de Loredo, con el fin de tentar votos de su bloque, que en los últimos meses se alineó con el Gobierno.