La Sala I de la Cámara Federal de Casación Penal, con los votos de Diego G. Barroetaveña y Daniel Antonio Petrone, confirmó el secuestro de la aeronave Boeing 747 300 de la empresa Emtrasur, que se encuentra retenido en Ezeiza desde junio último.

Vale recordar que el arribo del avión, matrícula YV3531, derivó en una investigación sobre las actividades de los tripulantes ante la sospecha de supuestas vinculaciones con actividades terroristas.

Hace apenas dos meses, la Sala III de la Cámara Federal de Apelaciones de La Plata confirmó la resolución del juez federal Federico Villena, quien hizo lugar a la solicitud del Departamento de Justicia de los Estados Unidos, argumentando que "violó leyes de control de exportaciones de relacionadas con la transferencia no autorizada del avión de Mahan Air a EMTRASUR, una aerolínea venezolana de carga y subsidiaria del Consorcio Venezolano de Industrias Aeronáuticas y Servicios Aéreos, SA (CONVIASA), una empresa estatal venezolana".

Por mayoría, Casación sostuvo que la "resolución recurrida, por su naturaleza y efectos, no reviste la calidad de sentencia definitiva ni se trata de alguno de los autos contenidos en el artículo 457 del Código Procesal Penal de la Nación, circunstancia que determina negativamente la posibilidad de ser recurrida ante esta instancia".

También aseveraron que los "argumentos esbozados en la presentación recursiva no constituyen una crítica razonada que logre conmover la decisión adoptada por el tribunal de mérito".

"En efecto, los recurrentes no logran demostrar -ni del pronunciamiento criticado se advierten- vicios lógicos ni manifiestas transgresiones al correcto razonamiento que pudieran sustentar la tacha de arbitrariedad, ni ninguna otra cuestión federal que amerite la intervención de esta Cámara como tribunal intermedio", concluyeron.