Juicio por el "Robo del Milenio”: absolvieron a los tres acusados y jamás se recuperó el dinero
Hace 13 años, una banda saqueó 99 cajas de seguridad de la sucursal Congreso del Banco Macro, llevándose un botín calculado en U$S 30 millones. Los fiscales habían pedido la pena de ocho años de prisión, pero el juez Carlos Mirat los absolvió.
Un exsubcomisario de la Policía Federal, su chofer y el encargado de un edificio fueron juzgados como presuntos coautores del denominado “Robo del Milenio” en el que hace 13 años una banda de boqueteros nunca individualizada, saqueó 99 cajas de seguridad de la sucursal Congreso del Banco Macro.
El debate comenzó en febrero pasado y el juez Carlos Rengel Mirat, del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 26 de la Capital Federal, decidió absolver a los tres acusados. La fiscalía había pedido la pena de ocho años de prisión.
Los ladrones nunca fueron identificados, como tampoco se recuperó el botín calculado en casi 30 millones de dólares entre dinero en efectivo y joyas.
El caso se conoce como “El Robo del Milenio” porque emulando a los autores del denominado “Robo del Siglo” al Banco Río de Acassuso ocurrido en 2006, en este hecho los ladrones también dejaron una frase burlona para los investigadores: “No será el del siglo, pero es el del milenium” (sic).
El hecho se inició cerca de las 22 del sábado 6 de marzo en la sucursal del Banco Macro de la avenida Callao 264, a poco más de dos cuadras del Congreso de la Nación, y terminó a las 7.17 del domingo 7, cuando se activó la alarma. Unas 256 cajas de seguridad fueron violentadas, pero solo 99 cofres fueron saqueados por los delincuentes, que se apoderaron de dinero en efectivo, joyas, lingotes de oro, documentos y otros valores.
La banda contaba con al menos un integrante especialista en alarmas, que logró “puentear” los dispositivos para que no se activaran e inutilizar la sirena. Luego, con los rostros cubiertos con pasamontañas y desviando el enfoque de las cámaras de seguridad, se trasladaron al subsuelo del banco.
Allí, luego de sortear algunas puertas, hicieron otro boquete que les permitió el ingreso a la bóveda, donde violentaron las cajas de seguridad y huyeron con el botín. La acusación contra los policías era que dieron cobertura a la banda que atracó el banco.