El PRO afronta tiempos de definición y una de las decisiones clave será quién va a ser el dirigente que encabece para retener el poder en la Ciudad de Buenos Aires, distrito que el partido amarillo coloniza desde la primera gestión de Mauricio Macri.

Según pudo confirmar Data Clave, se espera que este fin de semana se de un encuentro entre el expresidente de la Nación y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, los dos dirigentes que hoy centralizan la discusión por el juego de las candidaturas en el PRO.

La discusión es clara: de un lado, el exjefe de Estado quiere que su primo y actual ministro de Gobierno porteño, Jorge Macri, sea el sucesor; en tanto, el actual alcalde, dentro de su proyecto presidencial, tiene como anotados a tres dirigentes de su riñón: el ministro de Salud, Fernán Quirós, la ministra de Educación, María Soledad Acuña y el vicepresidente 1° de la Legislatura, Emmanuel Ferrario.

El problema que tiene el PRO es que la interna no recae solamente en su partido. Del otro lado aflora una Unión Cívica Radical que tiene como principal dirigente al senador nacional Martín Lousteau, referente de UCR-Evolución y la cara visible de la renovación interna del partido centenario.

El crecimiento de Lousteau en las encuestas no es mera casualidad. Luego de haber competido cara a cara con Rodríguez Larreta en el ballotage de 2015, ambos construyeron un acuerdo político y caminaron juntos durante gran parte de la gestión. Incluso en el último tiempo han compartido numerosos encuentros con los vecinos y encabezando actos de gestión.

Tweet de Martín Lousteau

Pero esta sinergia entre el referente amarillo y el dirigente radical no se refleja en el resultado de las encuestas. Un último trabajo llevado adelante por la consultora “Circuitos” indica que Jorge Macri es el dirigente con mejor imagen en la Ciudad, sacándole cinco punto a Lousteau.

El pedido de Macri para que su primo sea el sucesor no es solo una cuestión táctica, sino también estratégica. Es una decisión táctica en términos electorales y estratégica en cuanto a la gestión y las concesiones que pueda otorgar el propio exjefe comunal de Vicente López.

Vale recordar que la relación entre los primos está pasando por el mejor momento. El diálogo es permanente e incluso el propio Mauricio Macri visita a Jorge en su departamento ubicado en el barrio porteño de Palermo. Normalmente son los dirigentes los que suelen ir a visitar al expresidente, ya sea en Cumelén o en las oficinas de Olivos.

La inminente reunión entre Rodríguez Larreta y Macri será para poner en fila esta interna y definir a un candidato para que llegue competitivo a las PASO contra Lousteau. Ambos sectores del PRO descartan que lleguen divididos a esa instancia, lo que generaría una victoria asegurada por parte del radicalismo. Eso sí, el jefe de Gobierno porteño y el expresidente tienen visiones distintas de la Ciudad y alguno de los dos terminará cediendo. ¿Quién tiene más para perder?