La Provincia de Buenos Aires, al igual que otros distritos provinciales, empieza a mostrar dificultades para poder mantener el mismo volumen de entrega de testeos a los municipios para que diagnostiquen casos positivos de coronavirus. Desde el ministerio de Salud provincial se plantea llevar adelante una "estrategia distinta" y se buscaría empezar a mirar al virus con características de endemia.

El primer caso que alertó a los jefes comunales fue el de Chascomús, donde se observaron largas filas para los testeos, principalmente en el hospital central del partido. El intendente Javier Gastón, del Frente de Todos, lanzó un comunicado y advirtió que se iban a suspender los test masivos en el nosocomio municipal.

Otras provincias del país también readaptaron sus políticas por esta falta de oferta para contener una gran demanda de testeos, tanto en clínicas por las obras sociales como los pacientes que se dirigen a los centros municipales. Tucumán, a cargo de Osvaldo Jaldo, ordenó que los testeos sólo se aplicarán para embarazadas, mayores de 50 y pacientes con cormobilidades.

El anuncio de Chascomús por los testeos masivos

En el caso de la Provincia de Buenos Aires, la orden oficial sigue siendo la de garantizar que todavía hay stock para abastecer a los municipios. Sin embargo, las autoridades entienden que no hay mucho margen para mantener el mismo volumen.

"Veníamos preocupados con entregas muy esporádicas y escasas, y esta semana de parte de provincia entró algo más contundente", le manifestó un intendente municipal de Juntos por el Cambio a Data Clave, explicando que se solucionaron algunos problemas de demandas por la exposición pública.

Sin embargo, la postura del ministerio de Salud provincial es la de empezar a tomar al coronavirus con las características de una "endemia", es decir que la circulación comunitaria tenga tratos similares con otros virus que circulan. "Hay que pensar al coronavirus como se piensa en otros virus respiratorios. No estamos todavía preparados para tomarlo como una endemia, pero deberíamos tomar relevancia en los casos graves", le dijo una fuente provincial a Data Clave.

La postura de esta persona va en línea con las declaraciones públicas de Nicolás Kreplak, quien aseguró que "ya no tiene sentido mirar el número de contagios", sino que el foco debe estar en los diagnósticos y, en el caso de los pacientes con síntomas graves, en el aislamiento con la detección del virus.

La misma fuente que reservó su identidad, agregó en off: "El diagnóstico o el testeo debería estar reservado a estos puntos. Es fundamental el diagnóstico para tratar a esa persona. Hay una limitación con respecto al insumo, pero es a nivel mundial. Si testeamos a todo el mundo, no van a alcanzar".

La Provincia que dirige Axel Kicillof apunta a que los auto test puedan ser una herramienta para descomprimir a los centros de testeos, sobre todo en la demanda de las empresas para poder controlar mejor el ausentismo por covid-19. En ese marco, las autoridades provinciales no descartan que en breve se puedan dar otras modificaciones en los protocolos para especificar el uso de testeos en casos graves.