La sesión en la Cámara de Diputados que buscará reglamentar los Decretos de Necesidad y Urgencia (DNU) y limitar el poder del presidente Javier Milei enfrenta un escenario complicado. Desde las 15, la oposición intentará reunir el quórum necesario para aprobar la modificación a la ley 26.122, pero los bloques amigables del PRO y la UCR anunciaron que no facilitarán la tarea.

Rodrigo de Loredo, presidente del bloque radical, fue claro al anunciar que la mayoría de los diputados de la Unión Cívica Radical (UCR) no darán quórum. 

“No vamos a acompañar esta sesión convocada por el kirchnerismo y otros bloques para reformar la ley que regula los DNU”, sostuvo de Loredo, remarcando que “todos los gobiernos han utilizado esta herramienta y ahora quieren aplicar un estándar diferente a un gobierno de minoría parlamentaria como el de Milei”.

En sintonía, el PRO, tras una reunión encabezada por Mauricio Macri y otros referentes como Jorge Macri y Cristian Ritondo, emitió un comunicado en el que reafirmaron su postura: “No pondremos en riesgo la gobernabilidad ni votaremos junto al kirchnerismo”. La estrategia apunta a bloquear el proyecto de reforma de los DNU.

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X de Rodrigo de Loredo

La oposición kirchnerista, mientras tanto, confía en tener el apoyo necesario para avanzar con la reforma. El bloque Unión por la Patria junto con otras fuerzas como Encuentro Federal y Democracia para Siempre afirman contar con 135 votos, suficientes para superar el mínimo de 129 necesarios para el quórum. Entre sus aliados, destacan nombres como Sergio Acevedo y diputados de la izquierda, quienes también han expresado su respaldo a limitar el uso de los DNU.

Por otra parte, el bloque radical viene de atravesar una fractura interna con la salida de 12 diputados que crearon el espacio “Democracia para Siempre” bajo el liderazgo de Facundo Manes y Martín Lousteau. Julio Cobos, un radical histórico, también se desmarcó de la postura de de Loredo y anticipó que bajará al recinto para dar el debate.

En medio de estas tensiones, Javier Milei advirtió que vetará la reforma en caso de que sea aprobada. Según el despacho de mayoría impulsado por Unión por la Patria y sus aliados, la modificación a la ley establece que los DNU perderán vigencia si no son aprobados por ambas cámaras en un plazo de 90 días. Además, cualquier decreto que sea rechazado por una de las cámaras se considerará derogado, y el Poder Ejecutivo no podrá emitir uno similar durante el mismo período legislativo.

La falta de apoyo al proyecto de ley también responde a la presión de varios gobernadores, quienes buscan un reparto más favorable de fondos en el Presupuesto 2025. Los mandatarios de provincias como Mendoza, Corrientes, Chaco y Santa Fe se encuentran en negociaciones con la Casa Rosada y han puesto sobre la mesa sus demandas para asegurar la estabilidad económica en sus jurisdicciones.

Para Milei, este intento de limitar los DNU representa un ataque a la gobernabilidad de su administración. Por otro lado, sectores de la oposición consideran que es necesario poner freno a la discrecionalidad del Ejecutivo, especialmente en temas tan sensibles como el manejo de la deuda pública. Mientras tanto, la sesión en la Cámara de Diputados se anticipa como un pulso clave entre oficialismo y oposición.