Tras lo que fue una elección con un resultado agridulce, el gobernador Axel Kicillof ya empezó a mirar a futuro rumbo a lo que será el 2023. Claro, todavía queda mucho por transitar. Sin embargo, el mandatario provincial tiene en su horizonte más cercano la intención concreta de generar algunos nuevos ministerios.

La idea no es solo ganar puntos de apoyo para provocar un presupuesto de más valor en carteras de proyección sino también contar con nuevos espacios de poder para dejar a todos los integrantes del Frente de Todos contentos. En esa línea se habla de la creación de un Ministerio de Ambiente y otro de Cultura. El primero, estaría más avanzada y podría concretarse en los próximos meses. Incluso ya figuran distintos nombres para poder liderarlo.

En ese marco, desde el Frente Renovador levantaron la voz y dejaron en claro que pese a que “no andamos detrás de cargos, la nuestra fue una coalición electoral que se convirtió en una coalición de gobierno a nivel nacional, no así en Buenos Aires”, sostiene en diálogo con Data Clave, el diputado bonaerense del Frente Renovador, Rubén Eslaiman.

En otras palabras, el líder del espacio del massismo en la Cámara baja bonaerense esquivó la idea de una presión para el gobernador bonaerense pero aseguró que “si necesita una mano, estamos para sumar”.

El objetivo está marcado. Desde el espacio liderado por Sergio Massa saben que para sostener con creces una coalición es necesario nivelar el aporte de los espacios que integran el Frente de Todos.

“Es innegable la llegada de Sergio en la Provincia. Lo demostró elección tras elección. Si Kicillof no convoca, está desconociendo a una parte fuerte del peronismo”, le dijo a Data Clave un dirigente del Frente Renovador con base en la primera sección electoral.

La diferencia es clara. El presidente de la Cámara de Diputados de la Nación tiene llegada directa a diferentes carteras y espacios de poder en el ejecutivo nacional. Pero eso no sucede en la Provincia, donde Kicillof armó un gabinete de corte más kirchnerista y que, tras el revés de las PASO, sumó pejotismo con la inclusión de la Liga de los Intendentes, con Martín Insaurralde a cargo.

Estos movimientos fueron recibidos de muy buena manera por los jefes comunales y por los distintos actores del Frente de Todos ya que significó una apertura para un gobernador al que muchos tildan de cerrado. Pero, como era de esperar, también provocó que, en este caso, el Frente Renovador vuelva a levantar la mano y marque la cancha.

“Hemos apoyado todas sus iniciativas y tenemos una excelente relación con Kicilllof y todos sus ministros, pero es cierto que no contamos con funcionarios a cargo de ministerios. En una coalición de gobierno no podemos no tener un compañero en la gestión”, asegura Eslaiman.

Rumbo a lo que será la creación de los nuevos ministerios, la puja estaría justamente entre el Frente Renovador e Insaurralde, quien acumula poder en la provincia en representación de los jefes comunales y va por más.

El primer nombre que apareció fue el de la diputada nacional Daniela Vilar. La lomense forma parte de La Cámpora y es pareja del presidente de la Cámara de Diputados bonaerense, el también lomense, Federico Otermín, principal delfín de Insaurralde. Juntos conforman un vínculo que profundizó el acercamiento entre Máximo Kirchner y el actual jefe de Gabinete de Kicillof.

“Todavía no hay nada confirmado. Aparecen nombres y los vemos. Pero todavía no podemos decir nada”, le dicen a este medio desde el ejecutivo bonaerense. Sin dudas, el Frente Renovador ve con buenos ojos la posibilidad de quedar al frente de un ministerio que será trascendental para el mundo que se viene.