El PJ atraviesa por estas horas uno de los momentos más delicados luego de la confirmación de la interna que mantendrán, el próximo 17 de noviembre, la expresidenta Cristina Fernández y el gobernador riojano, Ricardo Quintela, por la conducción del partido a nivel nacional. Sucede que la ratificación de la contienda también impactó de lleno hacia adentro de Unión por la Patria.

En las últimas horas, el presidente del Frente Renovador y diputado nacional, Diego Giuliano, salió a dejar en claro que el partido liderado por Sergio Massa sigue con atención la discusión interna del PJ. Y dejó abierta la posibilidad de una ruptura en caso de que la disputa partidaria afecte de manera directa la unidad con los espacios que integran la coalición opositora.

"Respecto de la interna del PJ y como parte de la alianza que establecimos en Unión por la Patria, vamos a ver que sucede al interior del bloque. En función de lo que resulte de esta situación, vamos a evaluar nuestra participación”, manifestó en una entrevista reciente el exministro de Transporte de la Nación que interpreta de manera directa la voz de Massa.

El mensaje de Giuliano apuntó de lleno a reorientar la discusión como oposición. “Hoy no estamos para ver quién tiene más o menos poder. El Frente Renovador está acá para construir una alternativa seria frente a este gobierno de ajuste. Una interna no es parte de nuestro compromiso como espacio político con la sociedad”, sostuvo. Y agregó que ”vamos a esperar a ver como evoluciona esta interna. Seguiremos juntos en la medida que no rompan el bloque”.

¿Pero hay riesgo de fractura real? En los hechos, no. Cualquier tipo de división ya sea en el PJ como también en Unión por la Patria sería un guiño directo en favor del gobierno nacional que, de esa manera, tendría a su principal oposición fragmentada. Sin dudas, el mejor escenario para las intenciones del presidente Javier Milei. 

El Frente Renovador es un actor clave para UxP. Sobre todo en la provincia de Buenos Aires donde no solo comanda el ministerio de Transporte, con Jorge D'Onofrio a la cabeza, sino que además tiene una buena cantidad de municipios en su poder y valioso número de representantes en la Legislatura. No se trata, claro está, de un aliado más.

Sin embargo, Massa todavía no logró recuperar el terreno perdido tras la derrota electoral en el balotaje de noviembre pasado. Se lo pudo ver en la marcha en favor de las universidades de abril y de octubre. Pero sus declaraciones fueron escuetas. Su retorno a la arena política se estiró más de lo deseado. E incluso quedó preso de la presentación varias veces postergada de su nuevo libro “Querer un país”.

Impacto profundo

Lo cierto es que la directiva llegó. Y tiene como fin decir presente. El Frente Renovador quiere dar la pelea en unidad pero con presencia en las listas. Algo que, como siempre, traerá diferentes disputas hacia adentro. Sobre esto, el vicepresidente del bloque de Unión por la Patria en la Cámara baja de la Legislatura, Rubén Eslaiman, mano derecha de Massa en PBA, ya había dado su aviso días atrás: “Si va a haber 2, va a haber 3 listas en Buenos Aires”.

En diálogo con Data Clave, el "Turco" manifestó que “vamos a pelear por la unidad de los bloques mientras dure la interna”. Y sostuvo que espera que “la interna no afecte la gobernabilidad en los municipios”. Sucede que el FR tiene su cuota de mayor poder en los territorios bonaerenses con cerca de 20 distritos bajo el mandato massista.

Eslaiman, figura clave en la Legislatura bonaerense (lleva 13 años en su banca), le dijo también a este medio que el planteo del partido hoy es que “pasada la interna haya una mesa de la coalición para buscar unidad opositora para la estrategia electoral 2025 y orden en la construcción partidaria”.

Y pidió que “no nos lastimemos entre nosotros. Unidad y respeto a cada fuerza política que integra Unión por la Patria. El verdadero adversario está afuera y es el gobierno nacional con Milei y Macri a la cabeza, quienes están hambreando a la clase media y a la clase baja dejando sin derechos a nuestra sociedad y beneficiando al 5 por ciento más rico de la Argentina”.