El curioso caso de las dos derrotas (que no dolieron) del peronismo en el Conurbano
Dos gobiernos locales del GBA perdieron su elección. Sin embargo, elevaron su número con respecto a los últimos comicios y quedaron muy bien perfilados para octubre.
Pese a la derrota nacional, Unión por la Patria logró hacer una buena performance en la provincia de Buenos Aires. Sobre todo en los distritos del Conurbano, donde los oficialismos peronistas ganaron en gran parte de los territorios. Sin embargo, hubo dos derrotas que impactaron, pero que no sorprendieron y que, al parecer, tampoco dolieron.
Sucede que tanto en Morón como en Ituzaingó, el oficialismo ya había conocido la derrota en 2021. Y en estas elecciones, se repitió. Claro, todavía no hay nada cerrado ya que ambas caídas fueron por un margen muy pequeño y en Juntos el candidato que ganó la interna deberá fidelizar los votos de su contrincante de turno.
Cada caso, tiene sus aristas. En Ituzaingó se trató de la primera vez que el jefe comunal Alberto Descalzo no se presentó a una elección a nivel local. El jefe comunal gobierna el distrito desde su creación en 1995, cuando ganó el primero de los siete comicios que lo llevaron a ser, junto con Alejandro Granados (Ezeiza), el alcalde con más años en el puesto de la actualidad.
Sin embargo, en esta oportunidad decidió dar un paso al costado y dejar a cargo a su hijo Pablo, quien ya había sido medido para competir en 2019 sin los resultados esperados. Por lo que el jefe comunal tomó la decisión de volver a presentarse. Ahora, la parada era más brava que entonces ya que se venía un cuadro de paridad por delante. Algo que, en concreto, terminó pasando.
“Nuestra propuesta resultó ser la más votada por los vecinos de Ituzaingó. Agradezco a la comunidad que depositó en nosotros, una vez más, su confianza, para que sigamos trabajando por los sueños y el futuro de nuestro querido Ituzaingó. Seguimos adelante con el mismo amor de siempre”, aseguró sin reconocer la derrota a nivel partido.
En un distrito donde votaron poco más de 105 mil personas, Descalzo cayó por menos de 500 votos ante la sumatoria de Juntos. Una diferencia de poco más de 0.5 por ciento. Algo que, pese a la derrota, lo deja bien perfilado para octubre teniendo en cuenta que el ganador, Gastón Di Castelnuovo, difícilmente pueda sostener todos los votos de una interna de dos en la que se impuso con el 57 por ciento.
La interna contra Walter Lanaro fue dura. Y habrá que ver qué porcentaje de sus votos se lleva el tercero en discordia, Hugo Equiza (La Libertad Avanza), que sumó el 21 por ciento en la contienda. Cabe recordar que en los comicios legislativos de 2021, Juntos había logrado imponerse con una ventaja de poco más de 1.5 por ciento.
Morón también tuvo su particularidad. Sucede que el intendente Lucas Ghi llegó a este elección con un duro antecedente ya que venía de perder por 10 puntos de diferencia en los comicios de 2021. El resultado, esta vez, también fue de derrota. Pero con otro sabor. El alcalde cayó por poco más del 2 por ciento ante la sumatoria de Juntos por el Cambio que presentó dos candidatos locales.
El jefe comunal logró de esta manera una levantada importante con respecto a las últimas elecciones y quedó bien perfilado para octubre teniendo en cuenta que la diferencia entre Leandro Ugartemendia, el delfín del exintendente Ramiro Tagliaferro, se impuso por 50.8 a 49.2 en la interna de la oposición.
Algo que, al igual que lo antes mencionado en Ituzaingó, deja un margen muy pequeño en la posibilidad concreta de una fuga de votos hacia otras fuerzas de aquellos que votaron a Analía Zapulla, la representante de Patricia Bullrich a nivel local.
De esta manera, pese a que, en los números, se trató de dos derrotas y de que, en primera instancia, Juntos logró pintar de amarillo el territorio, ahora la oposición tendrá el difícil desafío de fidelizar el voto de los perdedores de las internas.