La Libertad Avanza (LLA) informó este miércoles por la noche que expulsó del partido al legislador porteño y fundador del espacio, Ramiro Marra, por haber votado a favor del aumento de impuestos en la Ciudad de Buenos Aires.

Así lo informó la cuenta oficial del partido, agregando que es "de manera irreversible" y “como consecuencia de no seguir los lineamientos del partido”.

En ese sentido, el oficialismo precisó: "LLA informa que el legislador Ramiro Marra ya no forma parte de La Libertad Avanza a nivel nacional ni en ningún distrito del país, de manera irreversible, como consecuencia de no seguir los lineamientos del partido y haber votado a favor del inaceptable aumento de impuestos en la Ciudad de Buenos Aires, que contradice los ideales del presidente Javier Milei".

X de La Libertad Avanza

"Todos aquellos que no respeten la agenda del Presidente serán expulsados. No importa quiénes sean", agregó el comunicado de la fuerza que encabeza Milei.

Desde el entorno del legislador se mostraron sorprendidos por la decisión, aún sabiendo que la relación del dirigente con el partido no pasaba por su mejor momento. Esto se profundizó con el desembarco de la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, como armadora del espacio de cara a las próximas elecciones.

El primer aviso de vaciamiento de poder que le propinó Karina Milei a Marra fue cuando reconoció a la legisladora María del Pilar Ramírez como presidenta del bloque libertario. En el pasado fue gerenta de La Cámpora en Aerolíneas Argentinas y fue expulsada durante el gobierno de Mauricio Macri.

Karina Milei, la arquitecta del poder libertario que construye desde la sombra

Desde la llegada de Javier Milei a la presidencia, la presencia de Karina Milei en el armado político de La Libertad Avanza (LLA) se consolidó como una pieza clave, aunque controvertida. A lo largo de 2024, “el jefe” no solo asumió el rol de estratega principal del partido, sino que lideró el proceso de expansión territorial, dejando claro que la construcción del espacio no admite grises ni disidencias internas.

Durante el último año, Karina recorrió 15 provincias y la Ciudad de Buenos Aires, enfocada en estructurar LLA como un partido sólido y con presencia nacional. Acompañada siempre por Martín Menem, la “primera dama” libertaria evitó alianzas con partidos tradicionales como el PRO y se centró en consolidar nuevas viejas figuras, priorizando a aquellas que comulgan con los ideales libertarios sin arrastrar compromisos políticos previos.

Karina no solo elige a los referentes provinciales, sino que marca límites claros. Ejemplo de ello fue el desplazamiento de figuras como Ramiro Marra y la exclusión de José Luis Espert, quienes, pese a haber sido aliados iniciales, quedaron fuera del esquema libertario por no encajar con la visión de la hermana presidencial. 

El modelo de expansión provincial de Karina Milei sigue una lógica centralista: actos cerrados a militantes preinscriptos y candidatos seleccionados con lupa. Bajo esta modalidad, figuras como Gabriel Bornoroni –un empresario cordobés sin trayectoria política previa– fueron promovidas en detrimento de dirigentes como Luis Juez, quien intentó sin éxito acercarse al espacio.

Actualmente, la prioridad de los Milei pasa por afianzar su control en el Congreso, donde las votaciones serán clave para avanzar en reformas estructurales. Mientras tanto, Karina no detiene su agenda, prepara giras para fortalecer la relación con la militancia libertaria, buscando mostrar una imagen de cohesión en un partido que, puertas adentro, atraviesa tensiones.

Aunque el armado de listas electorales se encuentra en pausa, Karina sabe que la fortaleza de LLA dependerá de su capacidad para evitar fragmentaciones internas. El 2025 será un año determinante para evaluar no solo el impacto de su liderazgo, sino también si su estilo de conducción puede sostener un proyecto que aún busca consolidarse como una alternativa real en el mapa político argentino.