Denuncian a Morales por querer demoler un excentro clandestino de detención para reformar el Cabildo
Organismos de Derechos Humanos presentaron denuncias contra el gobernador jujeño por no preservar un lugar que utilizaba la Dictadura para torturar y desaparecer personas y que hoy es un espacio de Memoria.
Organismos de Derechos Humanos denunciaron penalmente al gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, acusándolo de querer destruir un excentro clandestino de detención para reformar el Cabildo histórico provincial, ubicado en la plaza central de la provincia.
La presentación judicial la hizo la agrupación H.I.J.O.S de Jujuy y se basa en el “incumplimiento, en reiteradas ocasiones, de la ley de Sitios de la Memoria” que estaría infringiendo la gestión del gobernador.
La denuncia está vinculada a obras de demolición para la reforma del Cabildo histórico provincial, donde funcionaba la central de la Policía jujeña, y que fue señalizado como ex centro clandestino de detención, tortura y exterminio.
En la presentación se expone el incumplimiento de la ley de Sitios de Memoria por parte del gobierno de Morales, que -se asegura- era "complemente consciente del daño agravado que se cometía" al no acatar la resolución del juez Eduardo Hansen.
En tal sentido, se detalla que durante el mes de mayo se llevó adelante un recorrido en el sitio y se visualizó que, entre otras cuestiones, que "no estaban perimetrados los sectores que debían a preservarse" en función de su valor probatorio.
En octubre del año pasado, H.I.J.O.S. y otros organismos habían alertado sobre la decisión del gobierno de Morales de avanzar en la demolición de las paredes traseras del Cabildo histórico, como parte de una iniciativa para la construcción de un museo.
A partir de dicha situación, se presentó una denuncia ante el Juzgado Federal Número 2, por la que el 20 de enero de este año se obtuvo una resolución, dictaminada por el juez Hansen, que autorizó al Gobierno a realizar obras para la recuperación y puesta en valor del espacio.
No obstante, el magistrado había determinado que se debía “preservar” en ese lugar seis sectores de interés señalados por la Dirección Nacional de Sitios de Memoria.
“La Ley Nacional 26.991 establece que todo proyecto que se lleve a cabo en un sitio de memoria debe ser consultado y avalado por los organismos de DDHH. Sin embargo, y a pesar de haber llevado adelante una serie de reuniones, el gobierno avanzó en la destrucción sin consultar ni a la justicia, ni a los ente de aplicación de dicha ley, menos aún a los organismos, y destruyó lo poco que había dejado en pie”, indicaron desde H.I.J.O.S. Jujuy a través de un comunicado en el que se daba cuenta de esta nueva presentación.
Además, desde la agrupación señalaron que la ley de Sitios de Memoria "es una conquista de los organismos de DDHH, que esperaron pacientemente durante décadas los procesos de Memoria, Verdad y Justicia", que permitieron el rescate de lugares que tienen "un valor probatorio y simbólico trascendental" para las investigaciones por delitos de lesa humanidad.
“Tanto daño cometido por el Gobierno provincial, que los hechos demuestran, sin lugar a duda dan cuenta que sólo hay una explicación: el fondo de la cuestión es ideológico”, concluyeron.