Cristina Kirchner oficializa hoy su rol como presidenta del Partido Justicialista (PJ) en un acto previsto para las 18 en la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo (UMET). La ceremonia, donde será la única oradora, también servirá para presentar a los integrantes de la lista “Primero la Patria”. Este movimiento consolida su regreso a la primera línea política, en un contexto de internas partidarias y confrontaciones con sectores alineados con el gobierno de Javier Milei.

La jornada estará marcada por ausencias notables, como las de los gobernadores Ricardo Quintela, Raúl Jalil y Osvaldo Jaldo, además de la CGT, quienes no fueron invitados. Estas ausencias reflejan las tensiones internas, pero desde el entorno de Cristina defienden su liderazgo como un paso clave para reordenar al peronismo.

En su camino hacia esta asunción, la exvicepresidenta mantuvo reuniones con dirigentes claves, incluyendo un reciente encuentro en Moreno junto a Axel Kicillof, Máximo Kirchner y Sergio Massa, en el que debatieron estrategias electorales para 2025. Sin embargo, las diferencias con Kicillof, quien ha tomado distancia de las posturas más duras del cristinismo, agregan un desafío adicional a su gestión.

En una carta lanzada en octubre, Cristina ya había señalado la necesidad de no tolerar “actitudes funcionales al oficialismo”. Sus críticas apuntaron a gobernadores y senadores como Jaldo, Jalil, Edgardo Kueider y Carlos Espínola, quienes han apoyado medidas impulsadas por el Gobierno libertario.

Desde su proclamación, la líder peronista ha utilizado actos y recorridas para consolidar su mensaje. En noviembre, encabezó un acto por el Día de la Militancia en Santiago del Estero, y en Rosario clausuró el Encuentro Nacional de Salud con fuertes críticas a las políticas de ajuste de Milei. Además, en el conurbano bonaerense, se reunió con empresarios pymes y cooperativistas para denunciar la apertura de importaciones y sus efectos en la industria nacional.

El desafío de su conducción no será menor: equilibrar su oposición al gobierno de Milei con la necesidad de tender puentes hacia sectores disidentes dentro del peronismo. En el Instituto Patria, aseguran que la nueva presidenta del PJ buscará “federalizar” el partido con más viajes y convocatorias amplias. Sin embargo, la unidad total parece lejana, al menos antes de los comicios legislativos de 2025.

Cristina Kirchner, con un historial político que mezcla confrontación y estrategia, encara esta nueva etapa con la misión de revitalizar un PJ que deberá definir su rol en el panorama político. Las tensiones internas, los desafíos externos y las estrategias para consolidar una oposición efectiva serán los puntos clave en esta nueva etapa.