Avanzada radical: la UCR se envalentona en la provincia y ya piensa en candidatos propios para 2023
El partido centenario fue uno de los grandes ganadores de los comicios del último 14 de noviembre. Lograron re instalarse en la discusión grande luego de una versión desdibujada durante los 4 años de gestión macrista. El rol de Facundo Manes como revitalizador y la provincia de Buenos Aires como punta de lanza de un resurgimiento, que sienta las bases en el interior y desde allí busca dar la pelea en el corto y mediano plazo.
Si en las postrimerías del 2019 alguien hubiese vaticinado que en noviembre del 2021 la Unión Cívica Radical tendría un abanico de opciones para la compulsa presidencial del 2023, probablemente no hubiese sido tomado en serio. Sucede que el gobierno del ex presidente Mauricio Macri relegó a la UCR a un rol secundario, más allá de la estructura que aportó el partido en aquel 2015 emblemático que cortó con 12 años consecutivos del peronismo en el poder.
En especial este ninguneo se vivió en la provincia de Buenos Aires, donde a pesar de tener al vicegobernador Daniel Salvador acompañando a María Eugenia Vidal, el PRO tuvo el control total de las decisiones y la estrategia política y de gestión. En otras regiones se vivía más protagonismo, pero asomaba casi imposible disputarle el liderazgo a Macri o incluso a la propia Vidal en territorio bonaerense. Hoy el escenario es completamente distinto.
Si bien los amarillos comenzaron a marcar la cancha esbozando algunas posibles candidaturas en la provincia -intendentes de peso en el conurbano- los correligionarios no se quedarán de brazos cruzados. Es una fija que habrá interna con nombres propios de los boina blanca. Todavía no trascienden nombres, pero en estos dos años se enfocarán en pelear cada lugar.
“El resurgimiento del radicalismo a nivel nacional y especialmente a nivel provincial en este 2021 se basa en dos cuestiones. Una es la credibilidad que tiene el partido en cuanto a la ética, el empeño y el compromiso en el desempeño de su gestión pública. Y la otra, algo que ningún partido lleva a cabo, es la democracia interna", aseveró en diálogo con Data Clave el senador bonaerense y ex intendente de General Alvear, Alejandro Cellillo.
Y agregó: "este año aún en pandemia hubo una movilización espontánea de 120 mil afiliados que fueron a votar a una interna muy disputada a nivel provincial. Eso le dio relieve, movimiento y presencia al partido. Motivó mucho al afiliado para apoyar a un partido que tiene 130 años y se renueva en su mecánica y sus ideas”, apuntó
Para remarcar la importancia de la reyerta doméstica celebrada en marzo entre Maximiliano Abad y Gustavo Posse, el legislador señaló: “eso nos dio una visibilidad a la cual muchos ya se habían resignado, tanto dentro como fuera del partido. Sin embargo, el trabajo hecho especialmente por Daniel Salvador durante los 4 años que fuimos gobierno con Cambiemos, se vio complementado por el trabajo de un impulso nuevo que le dio la juventud y a través del trabajo de Maxi Abad. Esa interna nos posiciona a un nivel nuevo en el plano nacional”.
Pero además de la visibilidad, lo que fundamentalmente consiguió la UCR en este último turno electoral fueron votos. Y eso, tuvo bastante que ver con la búsqueda de caras nuevas. “Ese radicalismo fortalecido, terminó de impulsar a Facundo Manes para ingresar a la arena política. Eso permitió integrar una lista propia para las PASO contra el PRO y salimos muy bien posicionados con casi el 40% de los votos. Muy arraigados en el interior y con la instalación de un candidato que promete ser protagonista de acá en adelante”, subrayó Cellillo.
Y dejó un palito para sus vecinos de alianza: “El desempeño PASO y en las generales dentro de Juntos hace que tengamos algunos legisladores más, que fortalezcamos nuestro bloque de diputados nacionales y que el mapa de la provincia en el interior quede más pintado de radical que del PRO. Se abre un panorama completamente diferente a futuro”.
De cara a lo que viene, quien se posiciona para presidir el bloque opositor en la Cámara Alta bonaerense, aseguró que “esto también responde a un objetivo que ya teníamos. Nos habíamos propuesto llegar con un candidato propio a Gobernador -todavía no hay nombres- y con un candidato propio para Presidente, que sería Facundo Manes para el 2023".
Y añadió: "Buscamos recuperar municipios y fortalecer al radicalismo en cada localidad bonaerense. Esto abona también al gran resultado a nivel nacional, con un resultado categórico de Valdés en Corrientes, que fue categórico e histórico, sosteniendo a Morales en Jujuy y Suárez en Mendoza”.
Restan dos años para las elecciones en las que se decidirá el futuro de los bonaerenses y en política eso es una eternidad. No obstante, más allá de los imponderables, es un hecho que el radicalismo irá por el premio grande. Luego, se verán los pingos en la cancha, pero de movida, el último antecedente los alienta a pensar en grande. Pese a no haber logrado imponer el candidato en la provincia, sí ganaron varias internas en las distintas Secciones electorales y esa será una carta a jugar a futuro.