Argentina y México presionan a Biden para integrar a todos los países latinoamericanos en la cumbre de Los Angeles
Los cancilleres Cafiero y Elbrard preparan reunión paralela en los márgenes del encuentro principal de las Américas. El objetivo es mantener unido el bloque regional, a pesar de la postura de Estados Unidos, que no acepta la participación de Cuba, Nicaragua y Venezuela. Alberto Fernández jugó fuerte ante el enviado norteamericano: "si no estamos todos, no asistiremos", dijo el mandatario argentino.
El gobierno argentino está dispuesto a jugar fuerte para forzar que la administración de Joe Biden acepte invitar a todos los países de la región a la Cumbre de las Américas, que tendrá lugar en la ciudad californiana de Los Ángeles los primeros días de junio. Y este jueves lo demostró en dos frentes.
Por un lado, mientras en la Casa Rosada, Alberto Fernández recibía al asesor especial de la Casa Blanca, Christopher Dodd, quien llegó hasta Buenos Aires para intentar convencer al argentino de que acepte participar del encuentro regional, en México, el canciller Santiago Cafiero y su par Marcelo Ebrard comenzaron a coordinar un desayuno con los catorce países del Caricom, México y algún país latinoamericano más que podrían sumarse como Bolivia y Chile, en paralelo al evento continental y en la mismísima ciudad de Los Ángeles.
"La idea es presionar a Estados Unidos para que invite a Cuba, Venezuela y Nicaragua a la Cumbre de las Américas del 6 de junio", le dijo a Data Clave un funcionario del Palacio San Martín. A pocos días de la fecha programada para el encuentro regional, está casi descartada la presencia de Nicolás Maduro y Miguel Díaz Canel y tanto México, como Argentina juegan sus últimas fichas para torcer la decisión del mandatario estadounidense.
"Como presidente pro tempore de la CELAC, nuestro país va a llevar adelante este evento paralelo que no se va a contraponer con los horarios de la cumbre de las Américas, pero que tiene por objetivo mantener la unidad como bloque, a pesar de las diferencias", explicó la fuente a este portal.
Tras el encuentro en DF, Cafiero y Ebrard realizaron una rueda de prensa en donde destacaron la relación política y comercial entre Argentina y México y mostraron la sintonía política de ambos gobiernos. Sobre la Cumbre de las Américas, Ebrard ratificó la postura de AMLO y anticipó: "Las exclusiones serán un tema de la cumbre".
Por su parte, Cafiero agregó que "la CELAC es un foro sin exclusiones, de esa diversidad radica nuestra fortaleza para poder lograr un modelo de integración sobre la base del respeto aunque no todos pensemos igual".
Mientras tanto, en Buenos Aires Fernández recibió Dodd, quien enfatizó "la fortaleza de la relación de Estados Unidos con Argentina, construida sobre nuestro compromiso compartido con la democracia, los derechos humanos y la prosperidad económica. Reiteré nuestra esperanza de que Argentina sea un participante activo de la cumbre, lo cual es especialmente importante dado su rol como líder regional", sostuvieron en un comunicado desde la embajada norteamericana.
Durante el encuentro en la Casa Rosada -que se extendió por más de dos horas, en un clima cordial, pero tenso- Fernández le reprochó al enviado de Biden la ausencia de Cuba, Venezuela y Nicaragua en la Cumbre, ya que no fueron invitados por los organizadores y puso en duda la presencia de Argentina en el encuentro.
El mandatario argentino le manifestó que Estados Unidos tuvo una política “muy difícil” para Latinoamérica durante la gestión de Donald Trump. “Es una vergüenza que su país continúe manteniendo el bloqueo sobre Cuba y Venezuela”, le reprochó.