En este reporte analizamos cada sector del Merval y creamos un monitor financiero de la renta variable argentina. Te mostramos qué activos sugerimos sobreponderar (incrementar), subponderar (reducir) o mantener (neutral), según los resultados y valuaciones de cada uno.

Tras analizar todas las compañías del mercado local, consideramos sería ideal aumentar la exposición en las acciones de Pampa Energía (PAMP), Grupo Financiero Galicia (GGAL), Banco BBVA Francés (BBAR), Central Puerto (CEPU), Transportadora de gas del Norte (TGNO4), YPF (YPFD), Vista Energy (VIST) y Loma Negra (LOMA).

La joya del Merval

Pampa Energía (PAMP):

Una de las líderes del sector energético y cuenta con sólidos fundamentales. Parte de sus ingresos proviene directamente en dólares de exportaciones, lo que la sitúa como una alternativa de cobertura ante la volatilidad cambiaria.

Por otra parte, también vemos atractivo desde un punto de vista fundamental en los títulos de:

  • Grupo Fin. Galicia (GGAL)
  • Transp. Gas del Norte (TGNO4)
  • YPF (YPFD)
  • Vista Energy (VIST)
  • Banco BBVA Francés (BBAR)
  • Central Puerto (CEPU)
  • Loma Negra (LOMA)

Semáforo de empresas: ¿Cómo funciona? 

Clasificamos a las empresas en categorías para tener en cuenta al momento de invertir:

Fuerte Sobreponderación ✅:Empresas destacadas, de las cuales se espera un rendimiento muy superior al promedio del mercado. Recomendamos atribuirles una participación importante en cartera.

Sobreponderar🟢:Proyectamos un rendimiento superior al promedio del mercado. Recomendamos sobreponderar dentro del portafolio.

Neutral🟡:Se espera que la acción tenga un rendimiento en línea con el mercado. Recomendamos mantener la posición existente.

Subponderar🟠: Esperamos un rendimiento inferior por parte de la empresa o sector. Recomendamos reducir la participación.

Reducir🔴: Recomendamos disminuir la exposición a este activo en la cartera o considerar su venta.

Sectores del Merval

Sector de Oil & Gas

El sector de Oil & Gas sigue siendo nuestro favorito para estar posicionados actualmente, el optimismo en el sector se ve reforzado por el inmenso potencial de las reservas no convencionales en Vaca Muerta, donde las compañías continúan expandiendo sus operaciones. Además, la participación en proyectos estratégicos de infraestructura y energía renovable, como el de Pampa en PEPE 6, subraya un enfoque claro en la diversificación y la sostenibilidad a largo plazo.

A pesar de los desafíos macroeconómicos, el sector energético argentino sigue mostrando una sólida capacidad para generar valor, respaldado por la recuperación de la demanda interna y los avances en infraestructura clave. Con empresas que cotizan por debajo de su valor libro y un potencial significativo en activos clave, el sector presenta oportunidades atractivas para los inversores, con perspectivas de crecimiento sostenido en el futuro, tanto en la producción como en la ampliación de los márgenes, a través de mejoras en la eficiencia y reducción de costos.

Sector de Regulados

En el último trimestre, las empresas del sector regulado han experimentado un notable impulso en sus ingresos, gracias a los ajustes tarifarios implementados por las autoridades. Estos incrementos en las tarifas no solo han permitido una recuperación significativa en los márgenes operativos de las compañías, sino que también han fortalecido su estabilidad financiera. Este entorno tarifario favorable ha sido un catalizador clave para mejorar la rentabilidad de las empresas reguladas, lo que se refleja en su sólida posición financiera actual. Para nuestro análisis de valuación, hemos tomado como base los ingresos reportados en el último trimestre. Esta decisión se fundamenta en nuestra expectativa de que los ingresos de las compañías reguladas se mantendrán en línea con los niveles actuales en el futuro cercano, dado que los ajustes tarifarios recientes han establecido un nuevo piso en términos de generación de ingresos.

En este contexto, consideramos que el sector de empresas reguladas ofrece oportunidades atractivas de inversión. Mantenemos una visión positiva sobre estas compañías, especialmente en un escenario donde las tarifas continúen ajustándose conforme a la inflación y a las necesidades del sector. Creemos firmemente que, mientras se sostengan políticas tarifarias adecuadas, el sector regulado seguirá siendo un pilar fuerte y confiable para posicionarse en los mercados.

Sector Financiero

Si bien los bancos vieron subas en promedio del 100% en dólares hasta mayo del año en curso, estos recortaron parte de ella hasta comienzos de agosto. Sin embargo, la demanda de activos emergentes durante agosto impulsó nuevamente el atractivo por el sector, con el sector acaparando la mayor parte del flujo tanto local como internacional.

Respecto al último reporte, el negocio bancario comenzó un proceso de migración, pasando de riesgo BCRA a riesgo tesoro. Esto último tiene como objetivo cerrar la canilla de emisión monetaria, y utilizar el superávit del tesoro como fuente de financiamiento. Por otro lado, se incrementaron  la cantidad de préstamos otorgados al sector privado, lo cuál naturalmente eleva la previsión por pérdidas crediticias.

Sector de Conglomerados

El sector de conglomerados, que incluye a empresas como Mirgor y Sociedad Comercial del Plata, se encuentra bajo presión debido a la caída en la actividad económica general. A pesar de sus esfuerzos por diversificar sus carteras, la contracción del consumo y la desaceleración en sectores clave han afectado sus operaciones.

En realidad, ambas compañías han tenido un desempeño operativo pobre, lo que refleja las dificultades del entorno macroeconómico. La diversificación entre sectores ha ayudado a mitigar algunos riesgos, pero no ha sido suficiente para escapar de los desafíos económicos actuales.

Sector industrial y materiales

El sector industrial, de materiales y construcción es uno de los más afectados durante la transición económica que transita la Argentina. Luego de la devaluación del tipo de cambio en diciembre de 2023, la inflación acumulada durante estos 8 meses (94% estimada) de mandato, producto del reacomodamiento de precios relativos, y la caída del salario real, impactan totalmente en el consumo y la actividad. Esto se ve reflejado en los indicadores económicos que reflejan la actividad industrial y la construcción. 

Si bien se espera que en el 2025 comience un proceso de recuperación económica y un repunte del PBI, optamos por mantener una postura más cauta respecto del sector siderúrgico, aunque los datos del sector de construcción parecen mostrar cierta recuperación.