Alberto llegó a Brasil: visita a Lula con foco en inversiones brasileñas y fortalecer reservas
El presidente argentino arribó a Brasilia con una comitiva que incluye a Sergio Massa y Daniel Scioli. Se reunió con el mandatario brasilero en el Palacio de la Alvorada.
El presidente Alberto Fernández arribó a Brasil para reunirse esta tarde en Brasilia con su homólogo brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, con el objetivo de abordar la evolución del comercio bilateral luego de los acuerdos suscriptos por ambos a principios de este año, fomentar las inversiones de empresas extranjeras en la Argentina y avanzar en mecanismos similares al swap con China que permitan fortalecer reservas del Banco Central.
Fernández viajó acompañado por el ministro de Economía, Sergio Massa; el jefe de Gabinete, Agustín Rossi; el canciller Santiago Cafiero, la ministra de Desarrollo Social, Victoria Tolosa Paz; el secretario general de la Presidencia, Julio Vitobello y la vocera presidencial Gabriela Cerruti.
El Presidente mantuvo en horas de la tarde del martes una reunión con su par de Brasil, en el Palacio de la Alvorada. Del encuentro participaron todos los mencionados de la comitiva nacional. Luego de esto, el mandatario argentino y la Primera Dama, Fabiola Yañez, tenían pevisto una cena ofrecida por el presidente brasileño en la residencia oficial.
El encuentro será la continuidad del iniciado el jueves pasado a través de una teleconferencia entre ambos mandatarios y que, además, marca la sintonía política de la Casa Rosada y del Palacio do Planalto desde que el líder del PT asumió la presidencia en enero de este año.
"Hoy puede ser un día importante para la integración entre ambos países, sobre todo por la gran relación que tiene los dos presidentes (Fernández y Lula da Silva). Vamos a tener una jornada de trabajo intensa con una amplia agenda binacional de Gobierno", señaló el embajador argentino en Brasil, Daniel Scioli, esta mañana en declaraciones a Radio Nacional Rock.
"Trabajé en su momento para articular un gran acuerdo binacional con Brasil que está muy avanzado en todas las áreas y en los sectores energético y económico está avanzando en la parte final", remarcó el embajador.
El embajador y exgobernador de la provincia de Buenos Aires aseguró que los acuerdos que se suscriban entre ambos mandatarios también tendrán un "gran impacto y beneficio para Brasil porque se trata de financiar a los importadores de la industria brasileña para que fluya mucho más el comercio con la Argentina".
Scioli ponderó la relación que ahora tiene la Argentina con la administración de Lula da Silva y la diferenció de la que existía con el expresidente Jair Bolsonaro.
"Ahora, con Lula , todo se facilita porque tiene la convicción junto con Alberto Fernández, de que juntos somos más en este contexto internacional", remarcó.
Entre otros puntos, la reunión servirá para avanzar en la concreción de inversiones brasileñas en suelo argentino: "Hay un capítulo en el que vamos a poner foco, y es que Brasil busque mecanismo para financiar a los exportadores brasileños", agregó el diplomático.
Lo que Fernández y Lula buscarán es avanzar concretamente en un proceso que se viene desarrollando con fuerza desde el último trimestre del año pasado y que aceleró su ritmo este año.
Según la información a la que pudo acceder Télam, en ese período son más de 10 los encuentros formales entre funcionarios para explorar alternativas en el campo del financiamiento, a las que se suman otras 18 reuniones con el Banco Nacional de Desenvolvimento Econômico e Social (Bndes).
La presencia de Massa en la comitiva que se reunirá con Lula y en un posible encuentro con su homólogo Fernando Haddad apunta a la idea de recrear el mecanismo de pago de importaciones con yuanes para el comercio con Brasil. Según pudo saber Télam, es uno de los ejes propuestos será "fortalecer reservas a partir del financiamiento de importaciones vía Brasil". Ídem a lo de China y los yuanes", estimaron cerca de funcionarios argentinos que trabajan en la materia.
La idea de comenzar a modificar las divisas implicadas en el comercio bilateral tiene antecedentes: hacia fines del año pasado comenzó a explorarse la posibilidad de una moneda llamada "Sur" y, en las últimas semanas, el propio Lula realizó diversas declaraciones sobre una desdolarización del intercambio.
"Estoy a favor, en el caso de Brasil con Sudamérica, de que creemos una moneda para comerciar, que aquí en los Brics (la coalición de Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) se cree una moneda de comercio entre nuestros países, como los europeos crearon el euro", dijo el miércoles pasado Lula en su paso por España y Portugal.
La agenda de los Brics es también un punto que interesa al Gobierno argentino: Fernández ya expresó su intención de formar parte de ese foro en sus diálogos con el propio Lula, pero también con el primer ministro indio, Narendra Modi; con el mandatario chino Xi Jinping, y -antes de la guerra- con el ruso Vladimir Putin.
Por otra parte, el histórico líder del Partido de los Trabajadores (PT) tuvo en las últimas semanas otros gestos que han sido agradecidos públicamente por la Casa Rosada, entre ellos la crítica contra el desempeño de los organismos multilaterales de crédito, referencia explícita del caso de la Argentina y el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Lo hizo desde Shangai, durante la asunción de la expresidenta Dilma Rousseff como titular del banco de los Brics, el New Development Bank (NDB), cuando acusó al FMI de "asfixiar" a Argentina con las exigencias para el cumplimiento del acuerdo.
Lula aseguró que el NDB (Nuevo Banco de Desarrollo, en español) deberá funcionar como una alternativa al Banco Mundial.