Las claves del Remdesivir: el antiviral aprobado por la ANMAT para pacientes con COVID-19
Aunque la OMS no lo recomienda, tiene el visto bueno de la FDA desde el año pasado y ya se comercializa en Argentina. Especialistas aseguran que es una buena alternativa de tratamiento para las personas que se encuentran internadas con coronavirus en etapa inicial.
La Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) aprobó recientemente una nueva alternativa de tratamiento para pacientes con COVID-19 que estén hospitalizados. Se trata de Remdesivir, un antiviral que cuenta con el aval de la Food and Drug Administration (FDA) de Estados Unidos desde el año pasado.
El medicamento inhibe la enzima RNA polimerasa, deteniendo la replicación del SARS-CoV-2, que es el virus que causa el COVID-19. Según explican los profesionales, también sirve para las variantes de cepas conocidas hasta el momento porque las mutaciones se dan en la espiga “S”, que es la parte externa. Se administra en forma endovenosa y la duración del tratamiento es entre cinco y 10 días.
“Nosotros entendemos que es una muy buena alternativa de tratamiento en lo que es la primera fase de la enfermedad que es la viral”, señaló la Dra. Isabel Cassetti (MN 55.583), médica infectóloga.
A más de un año del inicio de la pandemia, se sabe que el COVID-19 se desarrolla en diferentes etapas con mayor o menor complicaciones en cada caso particular. La etapa inicial es la de replicación viral. Después avanza a la inflamatoria y, finalmente, la híper inflamatoria, que es a la que llegan los pacientes que están graves, los que pueden necesitar ingresar a terapia intensiva y requerir el uso de respirador.
La infectóloga explica que la droga está aprobada específicamente para la fase más temprana, desde el inicio de los síntomas hasta los 10 días, para aquellos pacientes que requieren oxígeno pero a bajo flujo y que estén hospitalizados.
“Además de disminuir la replicación viral se ha visto en el ensayo clínico, que justifica la aprobación en los Estados Unidos, que los pacientes que recibían Redmesivir versus placebo, se recuperaban más rápido. El tiempo de recuperación clínica era de 10 días versus 15 días. Por otro lado, había una tendencia a registrar menor mortalidad, sobre todo en el grupo que requiere oxígeno”, indica la Dra. Cassetti y agrega que también se comprobó su eficacia respecto al tiempo de externación y de menor progresión clínica en el grupo para el que fue aprobado por ANMAT.
Las instituciones locales están incorporando esta alternativa de terapia de acuerdo a sus posibilidades, debido a que se comenzó a comercializar en el país a fines de abril. Por ese motivo, todavía no se pueden brindar datos y resultados a nivel local.
Adicionalmente, como ocurre con muchos medicamentos y tratamientos, ya se comenzó a estudiar en otros escenarios y para otras indicaciones. En la actualidad, se están realizando estudios sobre el uso de Remdesivir en pacientes que pueden manejar el oxígeno de bajo flujo de manera ambulatoria.
Consultada sobre la postura de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que no aconseja el uso de Remdesivir, la Dra. Cassetti sostuvo que se debe a cuestiones metodológicas. “Cuando tenemos una droga que se aprueba, miramos primero la evidencia científica (con la que Redmesivir cuenta), y qué dicen las guías en el mundo. Las del Instituto Nacional de Salud de Estados Unidos y las españolas, entre otras, lo aprueban con las consideraciones de pacientes hospitalizados con neumonía moderada a severa que requieren oxígeno de bajo flujo”, argumenta la especialista.
En el caso de la OMS, la infectóloga advierte que “se basa en los resultados de la encuesta Solidaridad –en la que Argentina participó- donde no se muestra evidencia respecto a un beneficio en la mortalidad”. “Cuando se analiza ese estudio, la verdad que tiene algunos puntos cuestionables. Fue un estudio muy grande y que respetamos mucho, pero tiene algunas cuestiones metodológicas. Los otros países toman los datos y los actualizan y por eso incorporan el Remdesivir en sus guías”, agrega la médica.
El uso de corticoides, el suero equino y el plasma de convalecientes son otras alternativas para tratar a los pacientes con COVID-19 que están internados. “Lo más importante es entender que tenemos distintas estrategias para ser utilizadas en diferentes etapas de la enfermedad. Los corticoides son muy útiles en casos más avanzados, no en la etapa más inicial. Es más, hasta puede ser peligroso darlo en la etapa viral. Cada estrategia va a ser adecuada en el momento oportuno. Cuanto más precoz actuemos, mejor será”, afirma la Dra. Cassetti.
Un aporte importante es que Remdesivir se puede utilizar en combinación con corticoides, cuando se superpone la replicación viral y el inicio de la inflamación.