La semana pasada el United States Trade Representative (USTR) publicó el "Informe Especial 301 de 2024 sobre Protección y Aplicación de la Propiedad Intelectual", comúnmente conocido como "Informe Especial 301", presentando un cambio significativo en su percepción del régimen de patentes farmacéuticas en Argentina.

Este informe, emitido anualmente, evalúa las leyes y prácticas de diversos países, destacando aquellos que, desde la perspectiva de los Estados Unidos, no brindan una protección adecuada a la propiedad intelectual.

Este año, aunque Argentina continúa en la "Lista de Observación Prioritaria", el gobierno de los Estados Unidos ha modificado sustancialmente su enfoque con respecto al sector farmacéutico al abstenerse de objetar la política legislativa y regulatoria en materia de patentes farmacéuticas.

A diferencia de los últimos doce años, el USTR ya no incluye críticas relacionadas con posibles limitaciones indebidas a la patentabilidad de productos farmacéuticos y biotecnológicos en Argentina, ni cuestiona las pautas de patentabilidad vigentes desde 2012.

Las pautas de patentabilidad argentinas están diseñadas para evitar la obtención de patentes para innovaciones menores, promoviendo la competencia y garantizando el reconocimiento de las verdaderas invenciones en el sector farmacéutico y biotecnológico.

Este cambio de enfoque puede atribuirse al diálogo constructivo desplegado por la Embajada Argentina en los Estados Unidos, el Ministerio de Relaciones Exteriores y los representantes de la Cámara Industrial de Laboratorios Farmacéuticos Argentinos (CILFA), quienes han demostrado que las pautas de patentabilidad argentinas están alineadas con las políticas del gobierno estadounidense y la jurisprudencia de sus tribunales.

Asimismo, este cambio representa un reconocimiento de los avances de Argentina en la materia, así como la necesidad de garantizar una regulación equilibrada en el sistema de patentes, promoviendo la innovación y el desarrollo sin otorgar derechos monopólicos sobre innovaciones que no los merecen.

Este enfoque sienta las bases para continuar fortaleciendo el comercio bilateral con los Estados Unidos en medicamentos, materias primas e insumos farmacéuticos, y abre la posibilidad de integrar la cadena de valor farmacéutica argentina con la estadounidense en beneficio de los pacientes de ambos países.