El Gobierno porteño impulsó un proyecto para endurecer las sanciones a quienes manejen alcoholizados. Este texto fue aprobado por la Legislatura en la última sesión del año y abrió el camino para el debate del "alcohol cero al volante".

Cada año, los accidentes viales en el mundo causan más de 1,35 millones de muertes y lesionan gravemente a otros 50 millones. A nivel nacional se registra un promedio de 5.562 víctimas fatales por siniestros viales al año, lo que equivale a una tasa de mortalidad de 12,6 cada 100.000 habitantes. En el ámbito porteño, según las estadísticas, el promedio de víctimas anuales asciende a 149 personas.

El 82% de las víctimas son usuarios vulnerables -42% motociclistas, 37% peatones y 3% ciclistas-; mientras que 6 de cada 10 tienen entre 15 y 34 años, según datos de la Ciudad. Un gran porcentaje de los siniestros fatales se relacionan con el consumo de alcohol y/o estupefacientes.

En Argentina, la normativa actual establece que el límite permitido de alcohol en sangre para circular es 0,5 g/l. En las provincias de Córdoba, Salta, Tucumán, Entre Ríos, Jujuy, Río Negro, Santa Cruz y La Rioja, y ciudades como Mar del Plata, Rosario, Posadas y Ezeiza, entre otras, ya rige la normativa de alcohol cero.

En el ámbito porteño se presentaron varias propuestas, con el objetivo de "disminuir los siniestros viales". En este sentido, el legislador Eugenio Casielles impulsó un proyecto para prohibir la conducción del cualquier tipo de vehículo, motovehículo y/o ciclorodado “con más de 0,0 gramos de alcohol por litro de sangre”; mientras que la Defensoría del Pueblo presentó nuevamente una iniciativa que establece el límite en 0.2 gramos.

Este último proyecto no dispone un "indicador cero", para poner un “resguardo legal” ante posibles “errores en la medición”, algo que es criticado por algunos sectores, quienes también afirman que se trata de una medida "demagógica" y que "no sirve" en la práctica.

"Tolerancia cero" a nivel nacional

Meses atrás se presentó un proyecto de ley de “alcohol cero al volante”, impulsado por la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV), el Ministerio de Salud, la SEDRONAR y asociaciones de familiares de víctimas de tránsito.

El texto, que ingresó a la Cámara de Diputados, propone que el límite de graduación de alcohol en sangre permitido para quien conduzca un vehículo motorizado "sea cero en todo el territorio nacional".

Alcoholemia cero: el debate que se viene en la Legislatura porteña

La iniciativa recibió el apoyo de la Organización Mundial de la Salud, como así también de instituciones que conforman el Foro de Sociedades Científicas Argentinas y organizaciones de la sociedad.

Hace pocos días, la Consejo Federal de Seguridad Vial solicitó a los nuevos diputados electos que “tomen conocimiento de la propuesta legislativa” que se encuentra en la comisión de Transporte, para avanzar con su debate y aprobación en el recinto.

Según datos de la Agencia Nacional de Seguridad Vial, a nivel nacional el alcohol es uno de los principales factores de riesgo. La “tolerancia cero” ya rigen en países como Brasil, Uruguay, y Paraguay. En la ciudad de Río de Janeiro, por ejemplo, se redujo un 32% las muertes por siniestros automovilísticos, luego de dos años de su aplicación.

“La normativa actual de 0,5 como límite para conductores particulares invita a la especulación sobre cuánto alcohol es posible tomar, cuando lo que hay que entender es que bebiendo una sola copa la capacidad de conducción ya no es la misma”, afirmó el director ejecutivo de la ANSV, Pablo Martínez Carignano sobre el tema.