Paridad dólar-euro: cuáles son las mejores inversiones para los argentinos
La moneda europea perdió cerca del 15% de su valor en el último año. De fondo, la guerra en Ucrania, los temores a una recesión y la suba de tasas de la Reserva Federal de Estados Unidos. Los analistas recomiendan las opciones con menor volatilidad.
El euro cayó a su nivel más bajo de los últimos 20 años y cotiza por estas horas casi en paridad con el dólar, en el marco del temor que tienen los mercados por el inicio de una fuerte recesión económica en la Unión Europea (UE). Ese marco se suma a la incertidumbre local por la disparada del dólar blue y los financieros, que presionan la inflación al alza y deterioran el poder de compra de los ingresos argentinos. Así, los analistas recomiendan inversiones de menor riesgo y volatilidad, al tiempo que consideran que en el corto plazo es más conveniente pasarse de pesos al billete verde que a la moneda europea.
La directora ejecutiva del Centro de Estudios Económicos Argentina XXI (CEEAXXI), Eliana Scialabba, señaló que el contexto internacional de alta inflación afecta a las opciones que siempre fueron más “robustas” como resguardo, tal es el caso del dólar y el euro. “Sin embargo, a pesar de esto, el fenómeno de precios se debe en ambos casos a cuestiones externas y los bancos centrales se encuentran endureciendo sus políticas monetarias para desacelerar las presiones inflacionarias”, añadió.
En concreto, Scialabba afirmó que “el dólar lleva menores costos que otras monedas, ya que estás implican perder en las conversiones de punta compradora y vendedora. Sin embargo, en contextos como el actual, el oro es el mejor refugio”.
Para Agustín Etchebarne, “históricamente es muy difícil y complejo saber hacia dónde va la relación de ambas monedas”. “Se espera que la FED va a subir más incluso más rápido de lo que lo vienen haciendo la tasa de interés y dejando vencer todos los títulos que compró para reabsorber la inyección de dinero que se puso en los mercados durante la pandemia, eso generó una caída en los mercados de Estados unidos pero fortaleció el dólar contra el euro. A largo plazo es más difícil prever qué sucederá porque va a depender de las expectativas y el sostenimiento de la suba de tasas de interés o si eso termina repercutiendo en una recesión a partir del 2023”, explicó el director general de Libertad y Progreso.
Por su parte, el presidente de Romano Group, Alfredo Romano, comentó que hoy conviene más el dólar que el euro, pero que esa relación puede cambiar si el BCE comienza a subir la tasa de interés. “Sin duda para un argentino la opción de los CEDEARs es un gran mecanismo para resguardarse de las subas del dólar MEP o CCL que no están regulados y se venden a precios de mercado. También frente a la volatilidad y las bajas tan fuertes que se dieron en los mercados de Estados Unidos”, mencionó el también director de mercado capitales de la Universidad Austral.
“Me parece que se puede armar carteras con índices como SPY que sigue S & P 500, hoy estos instrumentos te resguardan de la volatilidad, y también QQQ que sigue a Nasdaq en donde se encuentran las mayores empresas tecnológicas de Estados Unidos”, agregó Romano.
Para Guillermo Santos Aramburo, socio de iCapital y experto en mercados globales, el dólar es “el único activo que se está mostrando como inversión refugio en un año tan complicado como el presente”. Así, la divisa de EEUU, según continúa Aramburo “es siempre receptora del dinero miedoso de cualquier parte del mundo y de ahí que acumule una revalorización de más del 12% en el año y haya alcanzado la paridad con respecto al Euro y revalorizaciones elevadas con respecto a otras divisas fuertes como el Yen (casi +20% de subida del USD)”.
En este sentido, la subida de tasas de Estados Unidos “ha favorecido también este movimiento, y también lo ha hecho la crisis energética con las fuertes subidas del petróleo y del gas que cotizan en US$ como otras materias primas”, comenta el socio de iCapital. Además, según los analistas de JP Morgan “este debilitamiento no es como el experimentado de abril y mayo, cuando la divisa se deslizaba en simpatía con un aumento de los diferenciales periféricos”.