No tan tranquilos: Guzmán y Pesce, atentos a lo que suceda con el dólar tras el fin de semana largo
La batería de medidas anunciada el jueves tiene como objetivo contener las expectativas de devaluación y fomentar el ahorro en pesos. Resta saber cómo tomarán los mercados estas señales, ya que en el Banco Central hay pocas reservas y cuesta cada vez más.
El Ministerio de Economía tiene en la mira el mercado de cambios, por los fuertes saltos de los dólares financieros de las últimas semanas luego del desarme de los bonos que ajustan por inflación. La batería de medidas que anunció la cartera que conduce Martín Guzmán el jueves tiene que ver con la preocupación oficial por estas variables y por la acumulación de reservas, objetivo central en la hoja del Gobierno.
A pesar de que el mercado alcanzó cierta calma en los últimos días luego de ciertos rumores de “reperfilamiento”, la crisis financiera parece haber sentado un precedente. El BCRA salió a comprar bonos CER para sostener los precios antes de una licitación del martes, pequeña, en la que se pudo más que cubrir el roll-over.
“Si bien nuestra visión es que no habrá reperfilamiento ni ahora ni en el próximo Gobierno, la realidad es que estos signos de agotamiento en el mercado doméstico hacen que empecemos a pensar que el Tesoro no podrá rollovear todo lo que vence de acá hasta fin de año”, advirtió Econviews.
El dólar contado con liquidación (CCL) cerró la semana en $24,15 y el MEP $231,6 luego de alcanzar un máximo de $233. “La brecha del canje (MEP vs CCL) hace varias semanas que volvió a ser positiva (excepto por ruedas puntuales), indicio de un posible agotamiento del carry trade que caracterizó a la plaza financiera en el primer período del año. Desde ya, el carry no solo se vio afectado por la suba de los dólares financieros, sino también por la corrección de los títulos CER”, señaló Ecolatina.
Esta dinámica se dio en el marco de un BCRA al que le está costando acumular reservas. En lo que va de junio la autoridad vendió US$ 339 millones mientras destina dólares para la importación de energía, que está en valores muy altos a partir de la guerra en Ucrania.
Las reservas netas alcanzan los US$ 3.000 millones y en el Gobierno ya admiten que no cumplirán con la meta del FMI para el segundo trimestre. De ahí la decisión de subir tasas de interés, a pesar de que pueden generar cierto impacto en la actividad, para estimular más el ahorro en pesos y una mayor liquidación del agro. En Economía creen que aún hay dólares del agro que no se liquidaron debido a varios factores que incluyen la “especulación”.
Es por eso que Guzmán confía en que alcanzará la meta anual con el Fondo de acumular US$ 5.800 millones en 2022. “Cabe destacar que este objetivo del acuerdo contempla ingresos netos de divisas por parte de otros Organismos Financieros Internacionales que aún no se han producido. No obstante, incluso asumiendo que los desembolsos pactados para el segundo, tercer y cuarto trimestre tuvieran lugar, estimamos que el Banco Central debería comprar como mínimo US$ 16 millones por día para no incumplir la meta de reservas anual original”, apuntó Ecolatina.
Más allá de cumplir con el acuerdo, el equipo de Guzmán confía en que con mayor disponibilidad de divisas habrá menores tensiones cambiarias y expectativas de devaluación. A su vez, debería bajar el ritmo de la inflación. Hoy la situación no es tan crítica como se vio la semana pasada, pero habrá que esperar para ver cómo asume el mercado las últimas medidas de Economía.