La deuda del Estado nacional finalizó el año pasado en US$ 394.047 millones, unos US$ 33.358 millones por sobre la marca con que cerró el 2021, según números suministrados por la Secretaría de Finanzas del Ministerio de Economía. 

Esto supone que el aumento en los compromisos del Estado fue de unos US$ 2.780 millones por mes durante el año pasado. Del total de la deuda, el 67% está nominado en moneda extranjera, mayormente en dólares, y el restante 33% en pesos, equivalente a US$ 131.181 millones de dólares. 

De esos compromisos emitidos en moneda nacional, el 52%, casi US$ 68.00 millones tienen algún tipo de cláusula de ajuste, ya sea por evolución de precios o dólar. De hecho, la deuda ajustada por inflación (CER) ascendía en diciembre pasado a US$ 48.397 millones, por encima de los US$ 45.707 millones que se le adeudan al Fondo Monetario Internacional (FMI).

La deuda en los tres primeros años del gobierno de Alberto Fernández y Cristina Kirchner US$ 73.522 millones respecto a los US$ 320.525 millones que dejó el de Mauricio Macri en diciembre del 2019. 

Frente a este panorama, ayer, el líder de La Cámpora, Máximo Kirchner, planteó la posibilidad de una renegociación del préstamo con el Fondo, en el que participen referentes de todo el arco político, al afirmar que por la curva de vencimientos de deuda "todo el sistema político está jugando con fuego".

"Imaginate si (Horacio Rodríguez) Larreta, (Sergio) Massa, (Eduardo) De Pedro, (Alberto) Fernández, Cristina, (Kirchner) y hasta la izquierda se presentasen ante el FMI y le dijesen: 'Así no podemos'. Imaginate si al FMI no le quedase otra que entender que no hay una quinta columna en el país que busca sacar tajada política del daño que provoca el endeudamiento, que no cuenta con una estructura política que aproveche el castigo que ocasiona a un gobierno democrático la sumisión a sus políticas", sostuvo. 

"Esa curva de vencimientos sólo va para arriba en el tiempo, y esos dólares que tenemos que mandar al FMI son los que le faltan a nuestras empresas. Se están llevando las divisas que requiere el desarrollo y cuando vienen, dicen: '¿Necesitás dólares? Bueno, dame el litio en bruto, acá no voy a hacer las baterías, me lo voy a llevar todo'. Y vos con la soga al cuello y con miedo de que te revienten la economía y para evitar que la gente se te vaya encima terminás hundiéndote cada vez más", opinó el dirigente en declaraciones al portal “Un cohete a la Luna”. 

En este escenario, el economista de la Fundación Mediterránea, Carlos Melconian, aseguró que los funcionarios del próximo gobierno “se van a tener que autocastrar de pedir ingresos del 2024 al 2033". 

"Argentina precisa una Moncloa del sector externo, una Moncloa de la deuda. Soy acuerdista de la transición. El quilombo no me gusta", dijo Melconian en declaraciones a Radio Mitre. 

El economista, que viene presentando una serie de propuesta de la Fundación a los próximos candidatos a presidente advirtió que un nivel de déficit fiscal como el que tiene Argentina “financiado con deuda externa termina mal. ¿Deuda interna en pesos para financiar agujero fiscal que no termina nunca? Termina mal. Déficit fiscal financiado con emisión monetaria. En inflación. Se entendió que déficit fiscal no puede haber, tenés que ajustar".

Para la economista Marina dal Poggetto “el problema es que, con el financiamiento en la pandemia, un mal manejo de la deuda en pesos y una reestructuración mal hecha se fue generando esta situación”.