Cuando el Gobierno festejaba la salida del director del Hemisferio Occidental del organismo, Rodrigo Valdés, de las negociaciones, la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, advirtió que no habrá cambios sustanciales.

“Confío en el criterio de Rodrigo en todos los aspectos, incluida la decisión de delegar las negociaciones del programa del FMI con Argentina a su adjunto, Luis Cubeddu”, dijo Georgieva a través de un comunicado el viernes.

La salida de Valdés, anunciada el jueves, buscó allanar el camino a un nuevo acuerdo entre el FMI y Argentina. El ministro de Economía, Luis Caputo espera que el FMI aporte entre US$ 10.000 y US$ 15.000 millones, una cantidad más que importante si se tiene en cuenta que en el gobierno de Mauricio Macri ya le habían dado US$ 45.000 millones, y que se los renovaron en el de Alberto Fernández.

Con ese dinero, el funcionario adelantaría el levantamiento del cepo, la unificación del tipo de cambio, algo que le “recomienda” el FMI, y así poder acceder a financiamiento privado del exterior, con una tasa de Riesgo País que se ubique por debajo de los 1.400 punto en que ahora se encuentra.

Pero el integrante del directorio del FMI, el argentino Claudio Loser, consideró que el apartamiento de Valdés fue una forma de evitar “peleas innecesarias” pero “esto no quiere decir de ninguna manera que va a cambiar lo que el organismo le va a pedir o que las negociaciones serán más fáciles”.

Loser, en declaraciones a CNN-Radio, consideró que el presidente Milei interpreta la salida de Valdés como un triunfo “porque él es personalista y él es el poder, pero en el Fondo eso no funciona así”. Por el contrario, el ex funcionario del FMI sostuvo que el personal del organismo mantendrá su postura en cuanto a salir del cepo y otras cuestiones que hasta ahora ha puntualizado.

Milei había dicho que “hubo complicidad del jefe de la misión Argentina del FMI con el Gobierno anterior" y que “Rodrigo Valdés tiene mala intención manifiesta”. Además, afirmó: “No quiere que le vaya bien a Argentina. Él tiene otra agenda. Nosotros somos sobre-cumplidores con todos pero prefirieron apoyar el desastre de (Sergio) Massa”, y se pregunto: "¿Por qué el FMI le permitía todo a Massa? Nosotros sobrecumplimos todos y todo el tiempo están poniendo peros. Avalaba todo el desastre de Massa y a nosotros nos hace los que nos hizo”.

Más allá de esta confrontación Loser también se mostró escéptico que un virtual gobierno de Donald Trump vuelva a ayudar a Argentina como lo hizo durante el gobierno de Macri. Trump puede ser amigo de Milei, pero no creo que le interese mucho ayudar a la Argentina y (cuando asuma en enero) estará metido en sus cosas, y si a lo mejor (el FMI) dice no prestarnos más...él está en una visión muy para adentro (de su país) y no le daría mucha importancia a esto”, advirtió Loser.

Sin embargo, destacó que el gobierno de Milei tiene a su favor que ha mostrado ”un ajuste (fiscal) extraordinario, no visto en la historia reciente y no visto en ningún otro lado en este siglo”.