Comienza la última semana de enero y las estimaciones apuntan a una inflación del 20%
La suba de los precios de los alimentos se desaceleró y el índice final parece colocarse por debajo del 25,5% de diciembre.
“Si la inflación de enero es igual a la de diciembre sería un buen dato; si es menor sería para festejar”, dijo el lunes el presidente Javier Milei sobre la marcha de los precios.
Ahora, las mediciones de diversas consultoras parecen querer “darle una alegría” al mandatario, ya que todos ubican la inflación en torno al 20%, a partir de un menor crecimiento en los valores de los alimentos.
Desde la consultora OJF & Asociados la estimación de la tercera semana del mes un incremento de sólo 1,4%, acumulando 15,4% en tres semanas, por lo que calculan que el índice mensual estaría finalmente cerca del 20%.
La suba del 1,4% de la tercera semana “fue el dato semanal más bajo en cuatro meses”, aseguraron desde la casa de análisis económico que dirige Fausto Spotorno, y señalaron como referencia, la inflación de la primera semana de diciembre había llegado al 10%.
En el caso de Eco Go, estimaron una suba bastante mayor en alimentos y bebidas, del orden del 3,8% en la tercera semana, aunque la variación de las últimas cuatro también muestra el mismo fenómeno de desaceleración de precios, ya que arrojó 15,7%.
Sin embargo, para la inflación de todo enero, en Eco Go estiman que podría estar cerca del 22,5%.
Por su parte Econométrica, estimó un incremento de 3,1% en alimentos y bebidas en la tercera semana. Para las últimas cuatro semanas, el comportamiento de este rubro puntual arrojó un incremento de 13,9%, muy por debajo de casi 31% que había evidenciado en la primera semana de enero. Con estos números, las proyecciones para la inflación de enero rondaría poco más del 20%.
El presidente Milei, en declaraciones a Rock&Pop, advirtió que en la medición de febrero habrá que agregar “un arrastre estadístico de por lo menos 10 puntos” del 25,5% que dejó diciembre por lo que “de ahí para abajo sería todo para festejar”.
Sin embargo, esta tendencia declinante podría verse afectada en febrero cuando se reajusten las tarifas de transporte en la Ciudad de Buenos Aires, junto con el primero de los incrementos de las tarifas de luz, con el objetivo de reducir los subsidios.
Lo que juega a favor de febrero que es un mes de “estacionalidad baja”, ya que comienzan las liquidaciones de indumentaria, y retroceden los valores del turismo.