Un brevísimo contacto que los dos detenidos por el atentado contra la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner mantuvieron en un local de comidas rápidas de la ciudad de Quilmes, en el sur del conurbano bonaerense, horas antes del ataque en la Recoleta, es una de las últimas líneas de la investigación.

Tres fuentes del caso confirmaron que se trata de identificar a esa misteriosa mujer con quien Brenda Uliarte y Fernando Sabag Montiel se cruzaron un par de segundos en el local de McDonald 's situado en el centro de Quilmes, según adelantó el sitio Infobae.

“Estamos trabajando en eso, sin conclusión por ahora”, confirmó una fuente de la causa a cargo de la jueza federal María Eugenia Capuchetti y el fiscal Carlos Rívolo, quienes en la noche del martes 6 ampliaron la declaración indagatoria de Sabag Montiel e interrogaron a su novia por primera vez.

La sospecha de los investigadores es que Uliarte y Sabag Montiel no estuvieron solos en el ataque contra la Vicepresidenta. Ya se informó que se investiga al grupo de amigos de vendedores de copos de azúcar, quienes aparecieron en una entrevista por Telefé para decir que no eran terroristas y que tenían miedo porque recibían amenazas.

Pero además se buscan otros vínculos o lazos de los dos sospechosos y de sus amigos, para determinar los alcances del grupo, para saber si sólo son un conjunto de fanáticos y odiadores o hay algo más. Las cámaras de seguridad y de los canales de televisión ya mostraron que los dos detenidos estuvieron en los días previos en la casa de Cristina Kirchner.

Y ahora también se trabaja sobre cámaras de seguridad que muestran el cruce de Uliarte y Sabag Montiel en el local de McDonald´s de Quilmes, a las cuatro de la tarde del jueves 1, unas cinco horas antes de que el el hombre acercara su pistola Bersa a centímetros de la cabeza de Cristina Kirchner, cuando llegaba a su domicilio, a eso de las 9 de la noche en la Recoleta.

Sobre el encuentro en el McDonald´s una fuente explica que había una pareja en el local. “Luego ellos, Brenda y Fernando, ocupan la misma mesa, segundos después. Ella va corriendo y agarra el papel que estaba en el piso, hasta acercarlo y leerlo, luego se lo pasa a Fernando”, explica el informante.

“Tenemos un encuentro de los imputados previó al hecho y un encuentro con una mujer que se está tratando de identificar y su vínculo con el hecho. Por ahora está verde. Seguimos analizando cámaras”, precisa otra fuente que trabaja en la pesquisa.

La misma fuente precisa que “estamos viendo un papel o nota que levanta del piso en la mesa que se sientan. Y esta mujer con la cual no comparte más que unos segundos y se dicen algo es la que se ve en los videos. Pero no podemos ver hasta ahora quien le da ese papel”.

La pesquisa está orientada a determinar todos los pasos previos de la pareja detenida en los días anteriores al ataque. La investigación “va en línea con todo lo que se está profundizando, en cuanto a la inteligencia previa que la hubo y mucha, premeditación. Y el contacto de Quilmes puede ser un indicio de eso”, dice la fuente.

Además agrega que “se sigue trabajando en la línea de la reconstrucción de los días previos, con análisis de imágenes, geolocalización, comunicaciones. Mucha información. Se va profundizando el material que corrobora que hubo premeditación e inteligencia previa, y más personas involucradas”. 

“Se está trabajando sobre el contenido surgido del celular de Brenda; reconstruyendo sus comunicaciones y mensajes en los días previos y durante el fin de semana, contactos con su entorno más cercano y otros vínculos del fin de semana, que intentaron ayudarla”, dice la fuente.

La misma jueza Capuchetti, antes de indagar a los detenidos corroboró, que hubo premeditación del ataque a la vicepresidenta. “El referido suceso tuvo planificación y acuerdo previo. Brenda Uliarte estaba presente en las inmediaciones del lugar al cual arribaron conjuntamente, habiéndose determinado que detentaban el arma de fuego secuestrada con sus municiones desde fecha anterior al hecho, cuanto menos desde el 5 de agosto de 2021”, dice la imputación.