Un grupo de trabajadores ferroviarios protagonizaron un corte este viernes en la estación Dario Santillán y Maximiliano Kosteki, partido de Avellaneda, que se extendió por cuatro horas y que generó un caos en Constitución al concentrarse miles de pasajeros que deseaban regresar a sus casas. 

Se trata de trabajadores de la línea roca que fueron despedidos hace un año y medio, en la gestión de Cambiemos y que mantienen al día de hoy su reclamo, pero este viernes resolvieron adoptar una medida de fuerza y cortar las vías, lo que produjo fuertes demoras en los trenes que unen al sur del Gran Buenos Aires con la Capital Federal, en medio de un delicado contexto sanitario. 

Protesta de trabajadores ferroviarios
Protesta de trabajadores ferroviarios

Las imágenes se repetían en simultáneo. Mientras Constitución abría sus puertas y miles de pasajeros ingresaban sin distancia a la estación, el informe epidemiológico del Ministerio de Salud comunicaba 27.363 nuevos contagios y 601 muertes en las últimas 24 horas. A esa hora, los trabajadores habían resuelto abandonar las vías al ser de que la empresa accedía a una reunión el miércoles próximo.

Denuncia y culpas repartidas: lo que dejó el caos en Constitución en plena crisis sanitaria

Las pantallas de televisión concentraban su atención en lo que ocurría en esa terminal mientras en el Gobierno nacional comenzaron a repartirse responsabilidades. 

Fueron tres los ministerios apuntados: Transporte (por ser el organismo a cargo de Trenes Argentinos), Trabajo (por el conflicto laboral) y Seguridad (por las demoras en despejar un piquete de pocos protagonistas). 

Desde Transporte sostienen que el reclamo surge de “25 trabajadores que quedaron de remanente de un original de 300 que cortaban el año pasado, se pudo ayudar y ubicar a casi 260 personas”. Además, informaron que “este remanente tienen diferentes problemas como por ejemplo despidos con indemnización (no se los puede tomar), por violencia justificada, despidos con más de 10 años, hay de todo”.

Respecto al caos generado, en la cartera que conduce Alexis Guerrero detallaron que “el personal de seguridad y de trenes argentinos trataron de ordenar a los pasajeros en medida de lo posible”, pero precisaron que “se juntaron los pasajeros de muchos servicios que estuvieron suspendidos”. Según Trenes Argentinos, “la gente pese a los pedidos de distanciamiento y espera de otras formaciones, la gran mayoría, se sube igual al tren”. Además, agregaron que “los micros dispuestos por trenes argentinos no dieron abasto”. 

Desde la cartera laboral, a cargo de Claudio Moroni, insistieron en que “no teníamos injerencia alguna en este tema, por ende no hay nada para explicar”. En el Ministerio de Seguridad, ante la consulta de este medio, detallaron que no hubo reacción por parte de las fuerzas de seguridad debido a que no había orden judicial. 

Horas más tarde de este conflicto, se sumó un nuevo condimento: el fiscal Guillermo Marijuan presentó una denuncia contra los trabajadores que protagonizaron el corte “ya que se ha puesto en riesgo la vida de miles y miles de personas, posibilitando las condiciones para el contagio del denominado virus COVID-19”.

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Según el funcionario judicial, “el derecho de los ex trabajadores de ferrocarriles de peticionar ante las autoridades, cede ante esta situación de peligro y exposición aún mayor, que pone en riesgo la vida de cientos de miles de personas que utilizan el servicio diariamente y en forma intempestiva se vieron privadas del servicio”.